Venezuela y, más que todo el gobierno nacional: necesita que alguien como ser humano o institución que le meta la mano en las cuestiones de estado que, no ha podido solucionar, por lo que Primero Justicia (PJ), desinteresadamente, le salió al paso a resguardarlo de la inseguridad galopante que día tras día se come vidas que recorre el país por todos los medios de miedo.
Por tal motivo, se fueron a la Defensoría del Pueblo a gritar consignas contra la inseguridad, disfrazados de héroes yanquis que han salvado la integridad física del mundo y, que posiblemente salvarán y defenderán a futuro como sólo ellos saben hacerlo, la vida de los venezolanos.
Fue tanta la euforia política de preocupación nacional que hacía falta de la presencia de un destacado líder que pudiera restearse y auxiliarnos del “vandalismo” que significa quedarnos al margen y, contra la pared de la inseguridad que, nos afecta a todos sin excepción y, en tal sentido, con esa preocupación pre 16-D acuesta e incómoda había que inventarse un parche de conciencia segura o, recalentar una idea preventiva de solución que nos dé calor social de protección y, como el gobierno no está haciendo nada en esa materia y, más bien ha disminuido dentro del presupuesto nacional 2013, la partida para resguardarnos de la “mala vida” de quienes la practican y nos la quitan que inquieta a los venezolanos.
Y, con una afinidad neocolonial y neoliberal que une a PJ con los héroes infinitos gringos tomaron: la siguiente determinación como decisión de aplacar con invención partidista planificada, lo que en sí, es una buena incógnita desconflictiva que salvará vidas en lo inmediato.
Por lo que Julio Borges: será nuestro superhéroe transnacional “El Zorro” que viene a poner fin a tantas injusticias juntas con su máscara de salvador sin igual que en PJ aseguran que, ahora sí se acabó el pan de piquito en el país y, aunque anda a pie, ya que no consigue un caballo negro que montar que no le maltrate su físico de galán que tanto le ha costado mantener en la palestra pública y, que además, no le cause un deseje y, teme que la AN lo declare fuera de orden por embestir sin cautela en el este da Caracas enmascarado y, como la cosa va en serio, tendrá de guarda espaldas a dos de sus más allegados compañeros que hagan por él lo que su zorrería requiere, ya que Capriles lo dejó a la intemperie al utilizar a su papá y a Juan José Caldera, para que que hicieran caída y mesa limpia en su nombre y, todo quedó en familia.
Y, en su defensa cercana tendrá a Batmán y el Hombre Araña que a cualquier hora del día y de la noche lo cubrirán de reflejos especiales para descubrir qué es lo que está pasando en la gobernación de Miranda en que los recursos asignados presupuestados entran y desaparecen sin dejar rastro alguno, lo que ha hecho que los aguinaldos de los empleados se fueran a Belén de paseo a ver si consiguen al niño dios que los ponga en su lugar nuevamente y puedan traer un grito de compasión: con mis hallacas no te metas Capriles que, allí El Zorro es nulo de atención cómplice y, solamente le quedará decir, aguinaldos pido, aguinaldos doy y, si no me dan nada de aquí no me voy que tiene mucho que ver con la seguridad social de los trabajadores de la gobernación de Miranda.
Y, la consigna en lo adelante será: a correr pícaros que allá viene El Zorro de Julio Borges. Y Julio Borges haciendo más zetas en el aire que un loco de perinola con su espada invisible de confrontación de sálvese el que pueda si no es de PJ.
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