Llegó el día y la hora en la AN: para que Diosdado Cabello personalmente acusara fielmente con pruebas por demás: el largo rollo de implicación corrupta, desarrollada por algunos diputados y personeros de PJ. Y lo hizo con una parsimonia bien pensada que, apartó del camino a los malos espíritus reaccionarios del incomodo.
Pero, por lo visto en la pantalla televisiva en el modo de comportarse de esa bancada como reacción fue tratar –más bien- de distraer la plenaria con pocos argumentos de defensa y, por el contrario se lucieron en atacar al gobierno con otros hechos de “corrupción” que nada tenían que ver con el caso planteado, lo que hizo fastidiosamente fue echarle más leña al fuego como contraofensiva verbal.
Y, cada vez que la cámara recorría el ambiente y, enfocaba el rostro de la diputada María Corina Machado: ésta dejaba al descubierto una cara de satisfacción involuntaria que si en ese momento la hubiera pinchado un zancudo histérico de pasión lúdica: habría caído -el infeliz- fulminado por el veneno que corría por sus venas apátridas que pulsaban un odio instantáneo hacia la figura de Diosdado Cabello quien, no la miraba con el telescopio de su amistad desde arriba.
Sin embargo, el diputado Julio Borges que, generalmente vive en la luna lunita de sus malcriadeces pueriles: jugaba con unos afiches que trataba de mostrar a la cámara en que se desvelaba en mostrar que: “Venezuela no es Cuba” y en eso se pasó toda la sesión, aunque a veces salía a caminar y a fastidiar a los suyos y fastidió tanto con su cartelito que, Diosdado se compadeció de él en su intervención de réplica a que enfocaran al “justiciero corrupto” que no le quedó más que seguir enseñando su cartelito con su gorra-atuendo de estrellas en sufrimiento que se caían de rabia.
Pero, la gran torta de la reunión, la puso el diputado Andrés Velásquez que después de dormir un rato se despertó asustado quizás, pensando que a él también lo iban a investigar y fuera de orden, propuso que realizarán la elección presidencial ya, si era que los chavistas tenían los dos ojos de la distracción bien puesto para echarle pichón y, su entusiasmo lo volvió añico una diputada de Bolívar que lo metió en el fango de su mala convivencia de cuando fue gobernador con bastante acciones de nadador corrupto que anda libre después, de vender la clase obrera como dirigente que fue de la Causa R.
Y después de reír y estrujarse internamente del susto que le comía el alma: tomó la palabra Richard Mardo -la vedette- de la trama resuelta de recibir los cheques de la corrupción dentro de
PJ y se ufanó con su “dios justiciero” al que ama ciegamente y, que no soltó ni por un momento como mejor le pareció en su defensa y aceptó su culpa como ayuda para otros y, lo más importante que dijo que, quedó grabado como un parto sin dolor en el parlamento y, que llora a la buena de su dios fue: “Tu Cabello usas el poder sólo para joder”, y dios le dijo en paz al oído: bien dicho –eso- ¡hijo mío! Por, lo que entraste en la Historia por la puerta de dios.
Y, lo más importante del debate de la AN fue que, la bancada chavista ganó al diputado Hernán Nuñez que perdió la MUD cuando éste dijo, con ustedes diputados sinvergüenzas y corruptos ni a misa y se caló la gorra de la Patria con un goce oportuno que lo llevó a darle la mano de la paz a Diosdado Cabello.
Y como un abreboca de ingenuidad de parturienta –Capriles- escribió: “es un honor” que investiguen a PJ.
Y Diosdado Cabello a Pedro Carreño: son tuyos y llévalos hasta su última consecuencia que eso “carajos” no merecen pisar más la AN.
estebanrrojas@gmail.com
