I

Rondón todavía no ha peleado

Rondón se quedó esperando. Nunca llegó el contrincante. Se quedó con las ganas de pelear, y no le quedó otra que bajarse del ring e irse a la Avenida Bolívar. La palabra clave es "se quedó"… No hubo nadie contra quien pelear. Por lo tanto "Rondón todavía no ha peleado". En efecto, se realizaron las dos marchas durante el día 19 de Abril, fecha histórica plena de patria. Una de ellas es catalogada como la madre de todas las concentraciones jamás vista en Caracas y en Venezuela. Fue la del chavismo. La roja, rojita. La de los revolucionaros y la de la gente de izquierda. Fue la marcha de la dignidad, la marcha de los buenos hijos de la patria de Bolívar y Chávez. Desde tempranas horas lo que se vio fue un panorama rojo, rojito. Donde la alegría, la música, los cantos, la solidaridad, la paz y el amor estuvieron de la mano de quienes asistieron desde todos los rincones del ´país a defender el legado de Hugo Chávez, para gritarles a los cipayos, traidores y vende patria que nunca más volverán. Contra el chavismo, no podrán. Contra Nicolás Maduro, no podrán.

II

Terminator Génesis, Satanás

Este 19 de Abril se une al histórico de 1810. Ha servido para darle una verdadera pela a los traidores (con el perdón de la gente buena que la hay por miles dentro de la oposición). Cuando digo traidores me refiero a la dirigencia de la MUD. Allí, en esa llamada Mesa de la Unidad está el génesis del mal (Satanás), pero gracias a Dios existe un "Terminator". Y hoy se ha hecho justicia. El pueblo de Caracas y de toda Venezuela dieron su cuota de sacrificio para decirle al diablo: "No, no pasarás". "No tienes vida". "Te han clavado una lanza en el pecho". "Estás acabado"… En efecto, lo que ha sucedido este 19 de Abril, es para nutrir las páginas de la historia de este pueblo. Se ha demostrado que la verdad puede más que la mentira. Quedó demostrado, por demás, que la Revolución Bolivariana llegó para quedarse. No hay quien pueda con ella. Ni los lacayos criollos. Ni la derecha rancia internacional. Ni el imperio estadounidense y los gobernantes arrastrados de Latinoamérica… Nadie, absolutamente, nadie podrá derrumbar el muro revolucionario que construyó Hugo Chávez.

III

Nicolás Maduro, el duro

Mientras tanto, el presidente Nicolás Maduro Moros, sigue crecido. Hoy día luce más duro que nunca. ¿Quién tiene la culpa? La pobre dirigencia de la MUD. Ese es el mayor factor que ha hecho que Maduro se fortalezca y se crezca cada día más. Pues, son unos mediocres, cobardes, traidores y vende patria, que andan por el mundo pidiendo que invadan a Venezuela, para terminar con el chavismo sea, como sea. Son unos cobardes que apenas huelen el humo de una bomba lacrimógena se desmayan, y se van dejando solos a su gente. A la gente que ellos mismos han convocado para ir a las calles a sembrar el terror y a destruir todo cuanto pueden. Son cobardes. No merecen ser dirigentes del pueblo opositor, donde hay gente buena. Gente valiosa, que se deja engañar por estos magos de pacotilla. Por eso, y por mucho más, Maduro le ha gritado a su pueblo, en la Avenida Bolívar, que ahora van por los votos en las elecciones regionales, y, más tarde, en el 2019, por una pela en las presidenciales.

IV

Desbandada

¿Qué hará ahora la MUD? ¿Con que cara, esos dirigentes, van a seguir mintiéndole a su gente? Yo hablé, en uno de mis últimos artículos, de un antes y un después del 19 de Abril. Pues, bien, el panorama les quedó muy, pero muy oscuro a la MUD. Tendrán que reinventarse. No sé cómo lo van hacer, pero no les queda otra. Hoy han dado pena. Dejaron con los crespos hechos a los fotógrafos extranjeros que esperaban algo… Algo bueno y especial para ellos mandar al exterior. Pero no hubo nada bueno. Todo fue malo. Muy malo. Rondón no los dejó lanzar un solo golpe. A penas unas declaraciones destempladas, lastimeras y llorosas de algunos de esa dirigencia devaluada. ¿Qué viene ahora? Vienen las elecciones regionales. El chavismo está listo para pelarlos a votos… Muchos votos… ¡Viva la paz! ¡Viva la Revolución Bolivariana! ¡Viva el amor!