La Revolución Bolivariana se ha propuesto la construcción del Socialismo del Siglo XXI por la vía pacífica, democrática y basada en elecciones libres. Quienes hemos estudiado algo de los clásicos del socialismo sabemos que aquí de plantea un antiguo dilema sobre sí es posible o no construir el socialismo “amigablemente”. Este no es el momento para desarrollar una discusión al respecto. Ya estamos aquí, a un día de las elecciones, y nos queda por ahora analizar los posibles acontecimientos a ocurrir en estos días. Tomando en cuenta sobre todo que la oposición se ha planteado estas elecciones como un punto de no retorno, como el momento del juicio final.
Manuel Castells, en un librito titulado Movimientos Sociales Urbanos el cual fue publicado por primera vez en español en 1974, se plantea al final del mismo el problema de llegar por la vía democrática al socialismo. Sus pensamientos de ese tiempo nos sirven de mucho para comprender la situación actual venezolana. En especial, cuando se refiere a la actitud de la derecha ante su derrota en elecciones democráticas. Afirma Castells que “… La experiencia demuestra que las clases dominantes cuando son batidas por los medios democráticos tratan de recurrir a la violencia. Por tanto, las fuerzas socialistas deben, por un lado, crear las condiciones necesarias para evitar dicha reacción; por otro lado, estar preparadas políticamente para dicha eventualidad. Pero a condición de contar, ante todo, con una adhesión de las masas a un proyecto socialista que, para sea ampliamente mayoritario, no puede sino ser pluralista y democrático” (pp. 123-124).
El golpe de estado del 11 de abril y el paro sabotaje petrolero han sido las principales reacciones violentas de la oposición ante las sucesivas derrotas electorales que sufrió de manos del Presidente Chávez con el apoyo mayoritario del pueblo. Todavía en ese momento no se debatía como hoy sobre la construcción del Socialismo del Siglo XXI. En ese momento su reacción violenta estaba dirigida contra Chávez, casi se trataba de un asunto personal. La situación no ha variado en ese sentido mucho hoy, sin embargo, se agrava al proponer Chávez la discusión en torno al socialismo y la inviabilidad del capitalismo. Aunque han tratado de simplificar el debate electoral y tratan de ridiculizar las propuestas de Chávez, saben que el proceso que se ha iniciado ha calado en la gente y cada día toma más cuerpo. Saben que los procesos sociales llegan a un punto en el que pueden ser irreversibles. Saben que en pocos días su proyecto político puede quedar enterrado por unos cuantos años más.
El pueblo demostró que sabe como responder a los ataques de las clases dominantes, sin embargo, tenemos que reconocer que éstas no pudieron responder con suficiente fuerza en esas oportunidades. Ahora están más organizadas y preparadas para reaccionar violentamente. Se ha comentado de sus contactos con paramilitares colombianos y la organización de grupos paramilitares propios. Las respuestas espontáneas del pueblo no serán suficientes, se necesita de organización y disciplina. Ojala que este análisis resulte equivocado, ojala que acepten la derrota electoral en paz y democráticamente. Pero no podemos bajar la guardia y dejar de estar alerta.
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