VIVEN DE LA MARRAMUCIA…Como ayer, están desesperados. Seguirán con sus torpezas y su desenfrenado antipatriotismo. Seguirán pelando el pedal y cometiendo errores. Intentando por todos y con todos los medios de desestabilizar. Gente que se vende y se entrega a la mano suelta imperialista y se convierte en mercenario al precio que sea. Seres a quienes poco les importa su país y por eso hacen lo que han venido haciendo, siempre con el argumento de salir de Chávez y acabar con la Revolución Bolivariana.
Esta oposición se enreda en sus marramucias y como la mentira tiene patas cortas, todos los días se les descubren sus macabros planes que cuentan con el financiamiento y asesoría de gobiernos extranjeros. Ya en las elecciones parlamentarias anteriores formaron su berrinche abstencionista que devino en arrepentimiento. Error político que no olvidarán y que de inmediato los puso a pelear entre ellos mismos. Igual, esa misma noche hablaron de fraude, cuestión que jamás comprobaron. Por si fuera poco, les ha dado por vincularse al paramilitarismo y no conforme con el asesinato de cientos de campesinos su innegable objetivo es salir de Chávez, no precisamente por la vía electoral y democrática.
ALLÁ ELLOS CON SU LOCURA…Como quiera que la oposición está motivada por las elecciones parlamentarias del próximo año, no queda duda que lo hacen sin renunciar a prácticas desestabilizadoras, con las cuales no han conseguido ningún resultado positivo y los condena inevitablemente al fracaso. No pueden contar con el apoyo popular, aquellos que todos los días atentan contra los intereses nacionales. Negativos a todo. Lo de ellos es negar cuanto diga y haga Chávez, para chocar con un avance y participación social que se reconoce en todo el mundo. Posiblemente el nivel de disociación les impida apreciar la realidad tal cual la percibimos y vivimos la gran mayoría de venezolanos. Lo cierto es que esta oposición, tan deslucida y ajada, vivirá en los próximos meses un verdadero calvario cuando intente subsanar la embarrada de las últimas elecciones parlamentarias. Allá ellos con su locura. Como decía un personaje al que llamaban “Matatigre”, allá en El Tejero-Monagas de los 60: “Ustedes lo que están es locos, enfermos y mal recetaos”.
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