Familiarmente, la traición consiste en defraudar a familia, amigos, grupo étnico, religión, u otro grupo al cual pueda pertenecerse, haciendo lo contrario a lo que los otros esperan. A menudo, cuando se acusa de traidor, tales acusaciones son controvertidas y disputadas, cuando la persona no puede identificarse con el grupo del cual es miembro, o de lo contrario está en desacuerdo con los líderes del grupo que hacen el cargo. Políticamente, el término "traidor" ha sido usado como un epíteto entre disidentes de un mismo partido o entre miembros de distintos partidos para anular el capital político ajeno. También se recurre, de forma más genérica, a calificar de traidores a funcionarios en el poder que son percibidos como incumplidores de los deberes públicos prescritos por el Estado, con independencia de que se pueda verificar o probar alguna acción traicionera.
Tránsfuga es una denominación atribuida en la política a aquellos representantes que, traicionando a sus compañeros de lista o de grupo -manteniendo estos últimos su lealtad con la formación política que los presentó en las correspondientes elecciones-, o apartándose individualmente o en grupo del criterio fijado por los órganos competentes de las formaciones políticas que los han presentado, o habiendo sido expulsados de éstas, pactan con otras fuerzas para cambiar o mantener la mayoría como alcalde, o bien dificultan o hacen imposible a dicha mayoría, saben de quien les hablo del caprichoso del Alcalde del Municipio Alberto Adriani del estado Mérida. Este señor tuvo las santas bolas de convocar a un pequeño grupo de personas para cerrar una de las vías más importante del Municipio Alberto Adriani, exactamente en El Vigía, El Iberia, por la sencilla razón que no fue escogido por el PSUV, para su reelección.
Camaradas tenemos que ser coherentes con nuestra ideología, porque si decimos que somos revolucionarios, y no lo demostramos con hechos, acciones y pensamiento, no somos revolucionarios un coño; simplemente estaríamos traicionando a todos los que nos votaron. Si bien el transfuguismo político del alcalde del Municipio Alberto Adriani, del estado Mérida, Robert Ramos, desde hace rato esto se veía venir; Robert Ramos ha estado en conversaciones con Richard Parra, adeco reconocido, y actualmente miembro activo del partido Un Nuevo Choro, en estas conversaciones se ha tratado de fortalecer, acuerdos políticos entre la oposición y el tránsfuga Robert Ramos, esto con el cometido de restarle fuerza al PSUV en El Vigía, y fortalecer a los partidos de la oposición, que aumentaron el número de votos en el Municipio Alberto Adriani, hasta el punto de perder por cinco mil votos, habiendo sido el Municipio Alberto Adriani un bastión Revolucionario.
El día viernes, 9 de agosto de 2013, este tránsfuga de Robert Ramos, decidió abandonar la militancia del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) que lo llevo a la alcaldía del Municipio Alberto Adriani del estado Mérida; y así mismo traicionar el legado de nuestro comandante Supremo Hugo Chávez, haciéndose el bolsiclón desconoce las bases del PSUV e irrespeta el reglamento interno, este tránsfuga desde hace rato demostró una actitud personalista y vanidosa, para muestra un botón ¿Qué hizo Robert Ramos, en cuatro años en el Municipio Alberto Adriani del estado Mérida?.
Y todavía este señor tienes las bolas, de decir que no pasó a la oposición sino que su distancia frente al Gobierno de Nicolás Maduro, se debe a que el gobierno revolucionario debió apoyar su nefasta gestión, con otra reelección. Camaradas, no hay nada distinto a lo que se sabe. Por ahora el tránsfuga de Robert Ramos, se conformará con ir directo, sin pasar por GO ni cobrar los Doscientos Bolívares al basurero político, allí lo estarán esperando con los brazos abiertos sus colegas tránsfugas Florencio Porras y Marcos Días Orellana.
Las deslealtades partidistas comenzaron a ser rentables, sino preguntémosle a la cuarta república: a Manuel Rosales, a CAPriles Radonski, a Leopoldo López, a Ismael García, entre otros. Presentarse con otras siglas a las elecciones y romper, por ende, con el partido que los formó, es aberrante, pero para muchos tránsfugas como Robert Ramos, parece atractivo. Y por último camarada, me considero revolucionario, creo en la política honesta como el único instrumento para mejorar las condiciones de las personas y de mi patria, y estoy dispuesto a seguir luchando, desde mi trinchera por una VENEZUELA más justa. Y que se acaben los tránsfugas.
Solo el pueblo Salva al Pueblo.
Patria Socialista o Muerte VENCEREMOS.
