El pasado 9 de diciembre, el pueblo de Venezuela dio una demostración de lealtad a la democracia y a la Paz, para elegir a través del sufragio a sus concejales, quienes son los funcionarios más cercanos a la comunidad y ante quienes el pueblo puede exponer sus problemáticas de manera directa.
La oposición no se puso de acuerdo, un sector importante de quienes adversan al gobierno se dejó influenciar por los radicales abstencionistas, inclusive otros se dejaron chantajear, saboteando a los alcaldes opositores que tenían sus candidatos y que recibieron el respaldo del otro grupo de la oposición que si cree en las elecciones y se midió con el PSUV y Gran Polo Patriótico, logrando algunos curules y evitando una derrota aplastante en su municipio.
El gran victorioso del proceso electoral municipal del pasado 9 de diciembre fue el pueblo venezolano que decidió que las diferencias se dirimen en las urnas electorales, pese a la brutal guerra económica que busca asfixiar a nuestro pueblo, pese a las deficiencias que tenemos en los servicios públicos, hoy tenemos unidad en las fuerzas de la revolución, y sobre todo, tenemos conciencia del camino que debemos seguir, la independencia de nuestro país está en juego, ese legado que nos dejó el Libertador Simón Bolívar y que fortaleció en este siglo XXI nuestro comandante Supremo Hugo Chávez, ese pueblo que cree en la Paz decidió ser libre e independiente, no se deja doblegar y marcha hacia adelante, demostrando que las grandes mayorías quieren elecciones, craso error de la oposición que a su militancia les ha cerrado esa vía, generando molestia y desanimo en la masa de la población que adversa a nuestro gobierno.
Carabobo es referencia nacional, desde la llegada de Rafael Lacava (Drácula), a la Gobernación de Carabobo, el ánimo en la militancia revolucionara revivió, ante un letardo prolongado, producto de la desidia que reinó y que hoy sigue padeciendo el pueblo noble de Carabobo, pero realidad que está cambiando gracias a la entrega de Rafael Lacava, que les devolvió la esperanza.
El efecto Lacava ha motivado al pueblo carabobeño, tanto a chavistas como a sectores que en algún momento fueron adversos al proceso revolucionario, Lacava ha sabido descifrar los códigos que maneja la juventud, las clases medias y el empresariado, con una gestión diferente, que ha permitido por ejemplo la victoria en Naguanagua tanto en la alcaldía como en las concejalías, inclusive en la zona norte de Valencia, anteriormente considerada bastión de la oposición, logrando la victoria con los candidatos del Gran Polo Patriótico en ese circuito, que en años anteriores era impensable, el efecto Lacava ha llegado a otros municipios adversos como San Diego, Bejuma y Montalban, hoy en día mayoría de quienes creen en la democracia y que se sienten identificados con Drácula.
Carabobo es y seguirá siendo victorioso, Lacava trabaja para todos, sin distinción, resolviendo los problemas en la época más difícil con ingenio y gracias al apoyo de nuestro Presidente Nicolás Maduro, quien es el Padrino de nuestro estado.