Algunos grupos económicos se movilizan para neutralizar a determinados candidatos propuestos para las próximas elecciones de noviembre, porque, simplemente no representan sus intereses de índole estrictamente comercial. Tanto el grupo italiano se moviliza por su lado, como el gobernador Luis Felipe Acosta Carles junto a Casal y Carlos García hacen su juego para aminorar la fuerza en la región del comandante Hugo Chávez Frías y sus postulados Mario Silva y Edgardo Parra.
Mario Silva de una manera cautelosa viene trabajando en las zonas populares de Carabobo y, su posición critica ante los problemas de la región es crucial para avanzar en las zonas que actualmente se encuentran invadidas y donde Acosta Charles ya le envió una señal de desafío al presidente Chávez Frías, enfranelando con las siglas de su partido a los invasores, tras la búsqueda de dividir a los oficialistas que no poseen una ideología sólida acerca del socialismo.
Carabobo es un Estado en déficit total y afectado por una serie de invasiones que es promovido por un sector del movimiento que lidera el gobernador y un ala de Acción Democrática que labora en el Ejecutivo Regional. El pueblo nunca ha sido consultado a nivel regional sobre la creación de Fundaciones que reciben recursos financieros del Ejecutivo, originando una diversidad de consultas y operaciones sanitarias. Las medidas son tomadas a capricho del grupo que tiene el control político en nuestra entidad federal.
Entramos en una etapa de fuerza electoral donde la actividad callejera será fundamental para recontar los votos y reducir al máximo los percentiles de la abstención. Es un período corto donde el dinero irá a la par de aquellos que les gusta comerciar con la política, pero, que carecen de ideología y traspillan al momento de presentar su discurso político. Aquí la opinión pública merece un poco de respeto en el futuro las leyes en el sistema electoral deben cambiarse y reafirmar el proceso democrático. Venezuela debe parir ideas a través de sus creadores para conformar bloques políticos donde la ideología constituya un sedimento verdaderamente político y de trabajo social. Ese es el verdadero socialismo, que, surge cuando la democracia social como sistema declina para conformar un nuevo sistema filosófico. Hemos llegado al punto inicial de nuestra inquietud pragmática, Venezuela comienza a nacer con un rostro nuevo y con la participación del Estado.
*Escritor/ Orientador/ Filósofo.
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