ORGULLO SUCRENSE…La realización de la Cumbre Extraordinaria de la Alternativa Bolivariana para los Pueblos de nuestra América, ALBA, que acaba de concluir en la ciudad primogénita del continente, exactamente en la antesala de otra importante cita regional como es la Cumbre de las Américas que ahora concluye en Trinidad-Tobago, nos deja el agradable sabor que en esta parte del continente estamos viviendo un importante proceso que significa cambios para bien de las mayorías. No se trata de guiarnos solamente por los discursos de los gobernantes. En la mayoría de los países de nuestra América es evidente que los aires transformadores hacia el progreso comienzan a sentirse. Mejor dicho, los partidos progresistas y de izquierda, para ser más preciso, avanzan de manera esperanzadora y ya los frutos comienzan a cosecharse. Una prueba es el ALBA. No es una alianza cualquiera. No es un rejunte de naciones que cualquiera pudiera catalogar de pobres. De verdad somos una potencia y la explicación viene por la riqueza económica, histórica y cultural que poseemos. Más allá de los proyectos integracionistas que han existido y aun existen en la región, el ALBA es una unión ideológica con un profundo contenido histórico, que en esta oportunidad, para alegría de quienes vivimos en el estado Sucre, resaltó el recuerdo del más grande hijo de esta tierra como lo sigue siendo el Gran Mariscal de Ayacucho, Antonio José de Sucre. En nombre de él todo el compromiso por desenvainar su espada liberadora, que sembrará de libertad, soberanía y bienestar a todo nuestro continente. Este es un orgullo que no podemos negar.
ESPERANZA Y REALIDAD… Desde este rincón del continente llamado Cumaná, ciudad de héroes, la reunión del ALBA ha servido para ratificar el proyecto de la Revolución Bolivariana que aquí en Venezuela dirige el Presidente Chávez. El momento ha servido para reafirmar y repotenciar el sentido internacionalista de este proceso. Por ello cada avance, traspiés o retroceso que den los pueblos de esta América, lo sentimos en carne propia. Cada amenaza la sentimos como nuestra, porque nos duele que retrocedamos en lo que tanto ha costado. Nos duele el acecho a Bolivia y que en casi todos los países la derecha antipatria insista en sus planes desestabilizadores.
FELICITAR AL PUEBLO SUCRENSE…Por su alta calidad de anfitrión en esta Cumbre del ALBA. Por su convincente demostración de civismo hacia las delegaciones que nos visitaron y por su compromiso con la Revolución Bolivariana.
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