Mientras Ciudad Caracas y Últimas Noticias se disputan las lecturas de los usuarios/usuarias del Metro de Caracas, después del acontecimiento o “sacudón” anunciado, que ocurriera dentro de las instalaciones del subterráneo caraqueño en días pasados, la calma vuelve a los vagones, para sosiego de sus angustiados/angustiadas usuarias. Este comienzo de semana, en el subterráneo una novedosa modalidad de saboteo se hizo presente: tocar el timbre de alarma sin ningún motivo, el objetivo: retrasar el servicio artificialmente. Pensamos que los cuerpos de seguridad deben ser implacables con quienes se dediquen a esa modalidad de “terrorismo subterráneo” por llamarlo de alguna manera, queda de parte de nosotros, los usuarios/usuarias, poner al descubierto a esos agentes de la subversión terrorista.
No pueden ser más desalentadoras las palabras del nuevo ministro de transporte y comunicaciones, Francisco Garcés, quien al tratar de explicar el “sacudón anunciado” que ocurriera en días pasados, intentó desacreditar las críticas al pésimo servicio que viene prestando el Metro de Caracas, desde hace por lo menos un poco más de un año, leamos sus comentarios: “Fue un cúmulo de fallas que se magnificó. Hay intención de algunas personas de magnificar cualquier cosa que ocurra”, (AVN, 19-07-2010). Es la postura del típico burócrata, los problemas ocurren porque se magnifican, si no, no ocurrieran; en otras palabras, lo que ha venido ocurriendo en el metro por más de un año, es incierto si no se magnificara, como se ve, el señor ministro tiene años que no viaja en el Metro, quizás desde sus años de estudiante universitario. Una dosis de realidad sería buena para el señor ministro o como siempre le recomienda nuestro Camarada Presidente, Hugo Chávez, a sus ministros: “el presidente Chávez adelantó que todo el gabinete deberá utilizar los días lunes, martes y miércoles para realizar labores de despacho, mientras que jueves, viernes, sábado y domingo deberán estar en la calle aplicando un plan de trabajo. Comentó igualmente que se reunirá todos los lunes con el vicepresidente a fin de evaluar los avances de esta nueva estrategia de acción. Ratificó su compromiso con los más pobres, al tiempo que aseguró que la estrategia del Gobierno Endógeno servirá para darle una batalla más dura a la pobreza y la exclusión. El jefe de Estado instó además a sus ministros a salir a la calle y a inspeccionar todas las obras que adelanta el Gobierno Bolivariano a lo largo y ancho del país de manera imprevista, a fin de determinar las fallas que pudieran existir y comunicárselo a él inmediatamente…” (Caracas, 8 de enero de 2007, Teatro Teresa Carreño). Mal comienzo, nada alentador…
Y mientras, el desubicado ministro, se orienta sobre lo que ocurre en nuestra Patria, el oposicionismo apátrida se está dando con todo en su afán de obtener una abundante representación para la Asamblea Nacional a elegir el venidero 26 de septiembre, derrotados en sus intentonas de golpe cambiario y alimentario, que acabarían con la vida política de los capos Mezerhane y Zuloaga, hoy prófugos de la justicia y refugiados en los EEUU, disfrutando de los dineros que robaron a sus abnegados seguidores/seguidoras; así como, la retirada astuta de los dueños de la Polar, Lorenzo Mendoza y su pandilla, derrotados en su intento de dejar sin alimentos a nuestro pueblo, quien hoy debe pagar caro su derrota, en abundante publicidad que le permita lavar el rostro de sus marcas comerciales correlacionadas. El oposicionismo implementa ahora, una nueva intentona desestabilizadora, esta vez, encabezada por la jerarquía eclesiástica, por su máxima autoridad, el cardenal Jorge Urosa, cuya postura a favor del golpe de abril de 2002, del paro petrolero, de las güarimbas, de cuanta acción active la oposición apátrida para derrocar al Camarada Presidente, Hugo Chávez, es harto conocida.
Pues bien, el Hugo Chávez pendejo de abril de 2002, quedó en el olvido y nuestro Camarada Presidente respondió acertadamente a esa nueva intentona eclesiástica por desestabilizar el país; la cual, se enrumba al fracaso, de allí la decisión de revisar el Convenio entre la Santa Sede y la República de Venezuela, suscrito entre Rómulo Betancourt y el Vaticano el 6 de marzo de 1964, por inconstitucional. Decisión presidencial que, al parecer, paralizó –por ahora- esta intentona del oposicionismo apátrida. Es evidente que dicho Convenio es improcedente desde la perspectiva de la Constitución Bolivariana, la mera lectura de su artículo 11, nos convence de su improcedencia, leamos: “El Gobierno de Venezuela, dentro de sus posibilidades fiscales, continuará destinando un Capitulo del Presupuesto, que seguirá llamándose Asignaciones Eclesiásticas, para el decoroso sostenimiento de los Obispos, Vicarios Generales y Cabildos Eclesiásticos. También se destinará una partida presupuestaria adecuada para ejecutar y contribuir a la ejecución de obras de edificación y conservación de templos, seminarios y lugares destinados a la celebración del culto…”, totalmente contrario a la disposición constitucional contenida en el artículo 59: “El Estado garantizará la libertad de religión y de culto…El padre y la madre tienen derecho a que sus hijos o hijas reciban la educación religiosa que esté de acuerdo con sus convicciones…” (Constitución Nacional). No sólo en la revisión de este Acuerdo debe quedarse la acción revolucionaria, sino que debe acompañarse con medidas radicales, como las aplicadas al gobierno fascista del capo colombiano, Álvaro Uribe Vélez, como el retiro de nuestro embajador y colocar en el refrigerador las relaciones con el Vaticano. Así como, emplazar a los políticos con sotana a registrarse como partido político en el CNE y así participar en las elecciones de septiembre públicamente, sin las máscaras negras con las cuales pretenden ocultar su militancia opositora y apátrida.
Mientras se desvanece la intentona desestabilizadora de la jerarquía católica, el oposicionismo importa terroristas de alto calibre como Chávez Abarca, lugarteniente del Bing Laden de nuestro continente: Posadas Carriles, el asesino mayor. Su declaración no pudo ser más elocuente: "Estábamos listos para poder hacer ciertas acciones de conspiración", dichas acciones terroristas se realizarían en conjunto con las “manitos blancas”, empleados de la CIA, como lo señala el terrorista en su declaración: "A usted le pueden decir 'mire necesito esto', equis, y usted dice... por eso es que decía allí (en el correo) para que venga a estudiar, para que venga a conocer, a estudiar en la universidad que está bien arrechito para que ellos vieran si lo que ellos me pedían se podía hacer o no", declara el terrorista detenido. Siendo el objetivo de sus acciones de terror: “Entre las acciones que venía a hacer Chávez Abarca para truncar las venideras elecciones parlamentarias que se realizarán en septiembre de este año, estaban "quemas llantas, hacer disturbios de la calle y atacar a un partido político".( TeleSUR, Fecha: 07/07/2010). Sin duda, que el oposicionismo apátrida no aprendió la lección que le dio el pueblo bolivariano en abril de 2002, sigue negado a derrotar a Chávez en el terreno democrático, un magnicidio sería un auto suicidio, el cadáver del Camarada Chávez no se iría solo a la tumba, miles de opositores le acompañarían al cementerio, el este caraqueño desaparecería y otros similares, jugar a la guerra civil sería mala conseja, es como mejor dejar el avispero tranquilo y dedicarse a hacer política, es nuestra mejor recomendación…
Por los momentos, la conspiración adquiere nuevos ribetes, la podemos ubicar en la Administración Pública; desde allí, los opositores apátridas sabotean los procedimientos administrativos, los convierten en verdaderas morrocoyas, nos comentaba una compatriota del HUC, como en dicho hospital de referencia nacional las citas se alargan, se pierden historias clínicas, valga decir, la actividad administrativa y hospitalaria cuenta hoy con ciertos trabajadores/trabajadoras que dedican su actividad diaria a hostigar al enfermo y luego acusar de ello, a Chávez. Y esto sucede, no sólo en ese centro de trabajo, sino que se ha hecho extensivo a todo el ámbito de la Administración Pública, repleta como está, de ufanados opositores y opositoras, viudos y viudas de la cuarta república. El llamado es a estar alerta, así como en el Metro de Caracas, de los saboteadores/saboteadoras de la gestión revolucionaria, hay que ponerlos al descubierto, quitarles las caretas.
En fin, no todo es conspiración y saboteo, el Camarada Presidente, Hugo Chávez, Bolivariano a toda prueba, como es, no podía dejar pasar este nuevo aniversario del natalicio del Libertador de la Patria, Simón Bolívar, sin hacerle un merecido homenaje a sus restos. De allí, la labor investigativa y restauradora que se inició en 2007, debido a cuestionamientos sobre las causales de muerte de nuestro Padre Libertador, y que entraron en su fase final con la exhumación de los restos mortales, iniciada el jueves 15 en horas de la mañana y que se extenderían hasta la mañana del viernes 16, procedimiento que pudiéramos observar en cadena nacional en horas de la madrugada del viernes 16. La exhumación duró 19 horas y, de acuerdo con las autoridades, arrojó hallazgos importantes que permitirán comprobar si efectivamente murió de tuberculosis en 1830, señala una nota publicada en el portal web de Telesur. El Camarada Presidente, lleno de júbilo en su Twitter señalaba: “Confieso que hemos llorado, hemos jurado. Les digo: tiene que ser Bolívar ese esqueleto glorioso, pues puede sentirse su llamarada”.
El sentimiento Bolivariano en su máxima expresión, eso es nuestro Camarada Presidente. En contraposición, los herederos de Santander, anti bolivarianos a ultranza, como lo demostraron el 11 de abril de 2002, en la auto juramentación de Carmona, día en que desaparecieron el retrato de Bolívar del escenario de Miraflores, se han dedicado a cuestionar esa actividad reivindicadora del Padre Libertador, involucrándolo vilmente en su campaña electoral, leamos: “La Mesa de la Unidad Democrática (MUD) rechazó "el espectáculo insólito de la exhumación de los restos del Libertador" Simón Bolívar y exhortó al presidente de la República, Hugo Chávez, a gobernar "en vez de participar en esos sainetes de satrapía". (Diario de Guayana, 17 de julio de 2010). Desconocen los miembros de la MUD, opositora y apátrida tenía que ser, que los restos del Padre Libertador han sido exhumados en períodos gubernamentales previos al Camarada Presidente, Hugo Chávez, según informan miembros de la Comisión Presidencial Especial, en gobiernos de Cipriano Castro, en el de Gómez, en que desaparece el sarcófago de piedras preciosas y oro, por el actual de bronce y, más recientemente, en gobierno de Rafael Caldera, en plena cuarta república, en que, como anotan quienes estuvieron de cuerpo presente en la exhumación, pudo develarse el poco respeto que tenían los gobernantes cuarto republicanos por el Padre Libertador, acompañar sus restos con una bandera nacional made in Reino Unido, ¡¡¡que irrespeto al Padre del gentilicio nacional!!!, ¿será por eso, que se niegan a conocer las verdades que rodean los restos del Libertador de la Patria?. Bienvenida sea la verdad histórica, que nos reencuentra con nuestro pasado y nos hace más y mejores Bolivarianos/Bolivarianas. Este nuevo natalicio del Padre Libertador, sin duda, será inolvidable, será una fecha de reencuentro del pueblo venezolano con su Simón, en palabras de Orlando Araujo y su poema: El Caballo de Bolívar:
Bolívar jamás tuvo un caballo: tiene un pueblo.
Uno tenía y era color de trigo y se lo regaló a José Martí.
Cuando murió Martí se lo regaló a un argentino y el argentino
a un chileno y el chileno a un jinete que venía de Nicaragua,
y el jinete de Nicaragua no lo desensilló:
Bolívar cabalga todavía.-
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