Cuando oímos al presidente Chávez leer la carta donde se advertía que la vida de Mauricio corría peligro, que se “cocina” una amenaza de invasión sobre Venezuela, antes que Chávez lo dijera ya el pueblo sabía que se trataba de él. En ese instante pasó por mi mente aquella Canción mexicana: el corrido “Mauricio Rosales”, que cantaba Antonio Aguilar.
El corrido cuenta la historia de Mauricio, a quien llaman el Rayo: un Hombre que se juega la vida sin paz ni reposo, para hacer Justicia, y nunca permite que al pobre lo humille el más poderoso. Mauricio brinda su mano a los hombres cabales, sugiere que “respeten las leyes y vivan tranquilos”. El Rayo es amigo del Pueblo, monta a caballo cruzando llanuras, cantando canciones de amores.
¡Quien puede dudar que esa canción describa la belleza humana del Comandante Chávez, un Hombre que se conmueve con la poesía, que pinta y canta las canciones del Pueblo! ¡Quien puede dudar que el Comandante Chávez está con los pobres de esta tierra y lucha sin descanso por la Justicia e Igualdad!
Chávez o Mauricio, viendo a Venezuela que al igual que un barco se hundía, como el mejor de los capitanes lo primero que hizo y sigue haciendo, fue lanzar millones de salvavidas a los que no sabían nadar, es decir: enseñar a leer y a escribir a casi 2 millones de venezolanos y miles de colombianos, combatir el hambre y la pobreza, mejorar las condiciones de vida del Pueblo olvidado, promover la salud, educación, cultura, crear fuentes de trabajo, creó las Misiones y mucho más.
Chávez o Mauricio, quitó la máscara a la burguesía y al capitalismo, culpables del hundimiento, y salvó el barco y está refundando la Patria junto al Pueblo que ahora sabe nadar, y han puesto proa rumbo al Socialismo.
El imperialismo no ha entendido que Chávez es el Pueblo y que este Pueblo como Mauricio les dice: No Pasaran.
Para los más jóvenes pueden oír el corrido “Mauricio Rosales” en:
http://www.youtube.com/watch?v=txSv0nTWG30