¡Qué felices aquellos “rebeldes” mercenarios que acabaron con el dictador Gaddafi, así como lo hicieron con Hussein, Milosevic y Bin Laden; ahora serán esclavos de la OTAN, de los yanquis, ingleses, franceses e israelíes y sus recursos naturales serán saqueados! En lugar de luchar contra el enemigo principal: el capitalismo y el imperialismo mundial que invaden y bombardean países, los tontitos y traidores batallan contra los peleles de casa, contra los tenderos de la esquina, porque su muy limitado cerebro no alcanza pensar ni sus ojos ver más allá de sus narices. Pero como el hambre y la ambición son cabrones, se venden por cualquier plato de lentejas.
¿Quién sigue ahora? Siria, Irán, Corea, Venezuela, Bolivia, Cuba, pertenecen a la lista de países del “Eje del mal” que los asesinos yanquis, ingleses e israelíes han seleccionado y no han dejado de trabajar para dividirlos. Les bastaría a esos países guerreristas con catalogar como dictadores a los gobiernos del “Eje del mal”, reiniciar una gran campaña de los medios de información a su servicio, para pasar a la organización de “rebeldes” mercenarios y luego dar órdenes a la OTAN para iniciar el bombardeo. ¿Para qué tienen los yanquis miles de bases militares rodeando estratégicamente a los países del Eje?