Es intolerable desde cualquier perspectiva lo que ha sucedido en contra del Presidente de Bolivia, Evo Morales. El que se pusiera en riesgo la duración del vuelo sin recarga de combustible y que se impidiera sobrevolar el espacio aéreo de algunos países europeos para su retorno, después de haberse aprobado un plan de vuelo, por la sospecha de que Snowden estuviese siendo transportado subrepticiamente por el Presidente Evo, además hace suponer que estos países europeos señalaron a Evo como un presunto delincuente internacional al prestarse para tal acción.
Las connotaciones de tal acción aún son difíciles de calcular, ya que además de atentar contra la dignidad de un mandatario boliviano, al final realmente se atenta contra toda América Latina y el Caribe, en el marco del esfuerzo de integración que se desarrolla actualmente, lo que implica la violación flagrante de un valor que empieza a desarrollarse como lo es la "soberanía latinoamericana".
Afortunadamente la respuesta inmediata de los países de nuestro continente fue rápida y oportuna, generando una reacción internacional que el gobierno boliviano solo no hubiese logrado por la invisibilización que existe de Bolivia y del Gobierno de Evo en los medios de comunicación internacional. Sin embargo, lograr invisibilizar a Argentina, Brasil, Venezuela y el resto de los países de Latinoamérica unidos es, aunque quieran, imposible.
Este concepto de "soberanía latinoamericana" que fue creada en la interpretación práctica del Presidente Chávez del unionista bolivariano, sin duda tiene un tamaño reto en este momento, demostar su existencia como valor en el marco de los diversos mecanismos de integración latinoamericana y caribeña, pero además tiene el reto asicional de pararse firme ante el imperialismo desbordado y sin formas que ha desarrollado Obama desde su hospedaje en la Casa Blanca, en una evidente política internacional de peores magnitudes defastas de la que desarrolló el muy torpe Bush.
Países como Francia, Portugal, Italia y los otros involucrados en la negación de los permisos de sobrevuelo, han evidenciado dos cosas:
1. Si hubo instrucciones directas desde los EUA, hacen pública su postura de colonia europea.
2. Si no hubo instrucciones directas, y fueron decisiones autónomas de sus gobiernos, estos han terminado practicando y haciendo público el "jalabolismo diplomático" más asqueroso de la historia.
George Orwell escribió en 1948 un extraordinario libro, pero estúpidamente mal fundamentado, titulado 1984. En él, pretendía señalar los riesgos que él suponía generaba el comunismo, tales como el autoritarismo, la desaparición de la vida privada, el control absoluto a partir del desarrollo tecnológico, y la instauración del "Big Brother", la computadora "comunista" que lo controlaba todo. Hoy en día todo está siendo real, menos el hecho de haber acertado qué ideología ha puesto la mano de la tecnología para el control y violación de la vida privada, ya que hoy es el capitalismo y en concreto el imperialismo gringo el que controla o pretende controlarlo todo, y uno de sus delatores es objetivo de persecución: Snowden.
En el marco del desarrollo del "Big Brother capitalista e imperialista", ha emergido una zona más que liberada, libertaria y de resistencia: Indoamérica, como diría Mariátegui. Y hoy hemos sido atacados en nuestra dignidad y soberanía, por ello la solidaridad y sobre todo las acciones concretas deben hacerse sentir:
1. Exigir explicaciones.
2. Exigir disculpas públicas ante tan miserable acción.
3. Llamar a revisar las relaciones económicas entre Mercosur, Celac, Alba, Unasur y los países europeos involucrados.
4. Llevar el caso a las Naciones Unidas de manera urgente y extraordinaria.
5. Convocar a otras organizaciones y países del mundo a sumarse a dicha convocatoria.
Al final, esta en nuestras manos colectivas poder sentar el precedente que evite que esto vuelva a suceder, pero aún más importante, que quede claro que no estamos dispuesto a soportar que esto vuelva a pasar.