La verdadera amenaza inusual y extraordinaria contra el imperio

Luego de que el títere que ocupa en estos momentos la Casa Blanca, en leal sumisión a los mandatos del gran capital, Barack Obama firmara el decreto amenazador contra el pueblo venezolano, nuestra soberanía y el Gobierno revolucionario, bolivariano y chavista, que encabeza el camarada Nicolás Maduro, una serie de acontecimientos resultan muy pertinentes de revisar y tener en cuenta, para poder entender dónde está lo inusual y extraordinario que "preocupa" al imperio yanqui sobre Venezuela y si, en realidad, estamos preparados para resistir las invasiones, primero, a nuestra conciencia y, segundo, en lo económico, social, político y militar.

Es indiscutible que "más nos han dominado por las ideas que a través de las armas", tal como lo constató y alertó, hace unos 200 años, el revolucionario independentista y Libertador, Simón Bolívar. La más silenciosa y efectiva invasión que hemos vivido bajo el dominio del imperio yanqui, es la de la alienación de nuestra conciencia, la de la aceptación de la "falsa conciencia" o ideología, impuesta por dominio, por quienes nos obligan a producir nuestros bienes en condiciones de explotación y, además, a que nos sintamos contentos con que ello sea así.

Es probable que el imperialismo, como fase superior del capitalismo, el imperio yanqui, como administrador político y militar de los intereses de aquél y, por supuesto el gobierno que hoy está representado por la figura del títere presidencial, Barack Obama, no hayan logrado dilucidar que, en Venezuela, en el año 1989, se produjo una ruptura histórica que –de haberla detectado el poderío imperial- quizás sí la hubiesen podido calificar, con acierto, como "inusual".

El pueblo venezolano, movido por un extraordinario y silencioso espíritu de comuna, alimentado por su rebeldía ancestral y el ejemplo de nuestros libertadores, se levantó contra el dominio del capital y su expresión neoliberal, generando una verdadera ruptura en los tiempos, en la era de dominación capitalista, y comienza a abrirse paso hacia su independencia definitiva, hacia su libertad y hacia la sociedad de las y los iguales, conocida como Patria socialista. Ese fenómeno, comprendido y asumido como motivación libertaria y de vida por el Comandante Hugo Chávez, es lo que lo convierte en líder del proceso revolucionario de estos tiempos. Es allí donde está lo inusual y extraordinario, que, tardíamente, empieza a entender el capital, como relación social y que lo lleva a empujar al Pentágono a la CIA y a la NSA, para que tomen acciones y al títere presidente Barack Obama, para que asuma el discurso y firme el decreto lleno de amenazas militaristas contra nuestro pueblo.

Hemos llegado a este momento en el que los fenómenos "inusuales y extraordinarios" se han hecho cotidianos –para decirlo parafraseando a Che Guevara- y evidencian el avance de una revolución que empiezan a sentirlos como irreversibles. Entonces, los dominadores y dueños de todos los medios de producción, quieren actuar y lo harán de la forma más brutal, represiva y exterminadora que conocen, la de sus guerras y el uso de sus poderosas armas, incluyendo las de exterminio masivo y nucleares, si el desespero y los riesgos de ser derrotados los llevasen a eso.

No creamos que hemos logrado contener la fuerza imperial del capitalismo a punta de tuíteres, de pronunciamientos, de movilizaciones y de fintas en ejercicios cívico-militares. Para vencer, debemos organizarnos. La principal fuerza del pueblo es la de su unidad y la de su organización. Con base en ello debemos trabajar. Para eso debemos prepararnos. Este es el momento. La coyuntura está dada. Más que saber empuñar un arma y saber de la organización y los desplazamientos en una guerra que –de darse- sería fundamentalmente insurreccional y del pueblo, lo más importante es saber empuñar la conciencia.

Las tareas de defender nuestra Revolución Bolivariana y Chavista y su camino de construcción de la Patria socialista, giran en torno al fortalecimiento de la conciencia, de la unidad y la organización. ¡Mande, Comandante en Jefe Nicolás Maduro, sabemos que usted es obediente a su pueblo!



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Iván Padilla Bravo

Director del semanario cultural "Todos Adentro", medio adscrito al Ministerio del Poder Popular para la Cultura. http://www.mincultura.gob.ve/

 ivanpadillabravo@gmail.com      @IvanPadillaB

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