El contundente trigo de Venezuela, su pueblo y su presidente en la cumbre del movimiento de Países no alineados (MNOAL) trae de cabezas a los agentes financieros internacionales.
Con estupor hemos visto la manipulada y fraudulenta opinión de la "calificadora de riesgo" S&P contra Venezuela, a partir de la jugada maestra de PDVSA en anunciar un canje de papeles de deuda de nuestra principal industria petrolera.
¿Quién en su sano juicio económico y financiero puede creer semejante manipulación?
S&P es una agencia de dominación colonial que los EEUU usan a su antojo para emitir opiniones fraudulentas contra los Países que no se le arrodillan. El mismo OBAMA ordenó investigarlos, cuando se atrevieron a bajar la calificación de riesgo de la deuda de EEUU hace unos tres años atrás.
Jhon Perkins en su libro "Confesiones de un gánster" testificó, como desde esas agencias se desestabilizan Países y sus economías.
S&P sabe que PDVSA es la empresa más sólida a nivel mundial en el sector petrolero y eso sin sumar a su balance el valor de las reservas que están bajo su administración. El índice patrimonial de PDVSA es inmensamente superior al resto sede sus competidores y sus costos de los más bajos del mundo. En plena guerra de precios petroleros, pudo PDVSA tener utilidad al cierre del año 2015 por el orden de los dos mil quinientos millones de dólares. Como es que con esos indicadores se atreven a bajar la calificación a PDVSA?
Este nuevo ataque ha sido repelido por los tenedores de bonos que han accedido al canje y la deuda venezolana se apreció en los mercados. Como queda la opinión de S&P y sus compinches que se hacen llamar "venezolanos"
La inmensa capacidad que ha demostrado el PDTE Nicolás Maduro y el equipo Técnico en PDVSA, trae de capa caída a los enemigos de Venezuela.
Nosotros sabremos sortear esta nueva emboscada, que vuelve atacar la confianza de inversionistas para aumentarlos de Venezuela y cual gigantes nos seguimos levantando contra tanta ignominia y TRAICION.
El pueblo venezolano y nuestro hermano presidente, venceremos esta y las que vengan.
