1. La palabra "populismo" viene de pueblo; es aquel discurso o aquella política que busca siempre favorecer al pueblo, pero que muchas veces lo engaña aprovechándose de él. Los populistas están siembre ligados con los indígenas y campesinos que trabajan la tierra; con los obreros que son explotados en las fábricas; con los estudiantes pobres que buscan condiciones para estudiar; con las mujeres, los homosexuales, los marginados que son maltratados y con sus derechos pisoteados. Los políticos populistas le prometen muchas cosas al pueblo para conseguir de él su apoyo; pero la mayoría de las veces no les pueden cumplir por las limitaciones, pero también porque el pueblo no sigue luchando, no continúa organizado para exigir.
2. ¿Quiénes son los antipopulistas? Aquellos que de las clases poderosas, millonarias y sus seguidores, que de entrada les disgusta la palabra "pueblo"; aquellos que piensan que el pueblo sólo debe dedicarse o servir para trabajar, para producir riquezas para los dueños del capital. Los antipopulistas jamás usan la palabra "pueblo" porque para ellos las diferencias son totales. Los antipopulistas nunca lucharán a favor del pueblo con ideas de liberación, de igualdad, de salarios justos o jubilaciones adecuadas y demás derechos. Mucho menos pueden aceptar los sistemas económicos socialistas o comunistas porque buscan la igualdad entre todos los seres humanos. Así que no confundirse: los populistas suelen engañar al pueblo; pero para los antipopulistas éste no existe.
3. En México el PRI, el PAN, los empresarios, los medios de información, han odiado siempre el populismo porque en sus políticas de manera permanente han puesto el acento en los grandes negocios económicos. Sólo el PRI, en sus inicios, en los años treinta y cuarenta, se valió mucho del populismo, siendo Elías Calles y Lázaro Cárdenas los más representativos; lo mismo se registró en muchos países como la Argentina de Perón; pero debe quedar claro que los populistas están siempre más implicados con el pueblo trabajador. Quisiéramos que los engaños y manipulaciones populistas no existieran; pero también deberíamos querer que no exista la explotación, la opresión, la concentración de la riqueza en pocas manos. El populismo es un producto histórico.
4. Perón, Roosevelt, Fidel Castro, Hugo Chávez, Lula da Silva, Daniel Ortega, al encabezar políticas que buscaban beneficiar a sus pueblos, con ideologías más o menos de izquierda o socialdemócratas, que movilizaban a las masas, fueron acusados de populistas; sin embargo Hitler, Mussolini, Pinochet, Reagan, Bush, Trump, Salinas, Fox, Calderón, Peña, con ideologías fascistas de dominación; que jamás nombran al pueblo porque están al servicio de los grandes empresarios, nos enseñan con su ejemplo porque son antipopulistas, neoliberales y proimperialistas. Así que el pueblo mexicano no debe dejarse engañar. Las campañas políticas han entrado en su fase violenta y todos los partidos, gobiernos, empresarios y medios de información buscarán evitar que López Obrador obtenga la Presidencia (21/IV/18)