"El Reino de Dios no es otro que el reino del socialismo verdadero, auténtico, un reino donde no haya clases sociales ni groseros privilegios".
Hugo Rafael Chávez Frías (Aló Presidente N. 247, Ciudad Guayana, 19 de febrero de 2006)
La falsa e hipócrita ayuda humanitaria que el imperio norteamericano junto a sus lacayos de Colombia pretende introducir a la fuerza en Venezuela, como un pretexto para abrir una cabeza de playa a través de la frontera, también se ha convertido en una cofradía secreta para la iglesia católica venezolana.
Da la ligera impresión que una vez que el imperialismo se ha quitado la careta y ha pasado a dirigir la oposición de nuestro país con el Presidente Trump al frente y sus lacayos del "Cartel de Lima", la genuflexa CEV, cúpula de la iglesia católica venezolana, a través de sus líderes religiosos también se suman a la cola.
La dirigencia eclesiástica o partido político de los curas - como lo califica el presidente de la ANC y líder del Psuv, Diosdado Cabello - se ha derrapado y sin ningún pudor, apoya descaradamente la estrategia gringa y reconoce como presidente interino al impostor Juan Guasón y además, para completar el cuadro, ha entrado en desacato con el Papa Francisco.
Igualmente no es nueva la posición política que ha asumido un grupo de púrpuras venezolanos, quienes más por temor a perder sus privilegios obtenidos desde la IV República, ahora le temen a la Revolución Bolivariana desde la llegada del Comandante Hugo Chávez y el Presidente Nicolás Maduro Moros al poder.
Son por demás conocidas las frecuentes declaraciones de obispos y curas "escuálidos" quienes a través de diferentes medios de comunicación en Venezuela, no dejan de manifestar su odio y desprecio por el pueblo chavista y por ende al de los pobres, quienes hoy han encontrado una luz en el túnel gracias al actual proceso revolucionario.
Si bien el Papa Francisco ha mantenido prudencia para no enfrentar a la CEV por sus arremetidas contra el Gobierno del Presidente Nicolás Maduro, su actual cardenal - "adeco con sotana" - ha guardado silencio para respetar - hasta ahora - la condición pedida por el Estado venezolano al Sumo Pontífice para avalar su curul cardenalicio.
No obstante las presiones contra el Vaticano han sido continuas y los golpistas en determinados momentos han visitado a la Santa Sede, gracias a los lobby que han hecho algunos púrpura y obispos venezolanos, ante la diplomacia del estado romano (Ejemplos, visitas de Julio Borges, la Sra. de Ledezma y la Sra.Tintori de López al Papa).
Recientemente hemos leído las destempladas declaraciones de un obispo, "vaca sagrada del Táchira", quien se ha quitado la estola y la mitra para hablar pendejadas del gobierno revolucionario, aplaudir al presidente impostor Juan Guasón y abogar por una ayuda humanitaria, la cual quiere imponer a la fuerza el imperio norteamericano y que no es precisamente una ayuda de Caritas.
Toda la comparsa avalada por la CEV no deja de asomar en los actuales momentos, cuando más necesitamos invocar la paz, sus oscuras intenciones. Por eso vemos como la "procesión va por dentro", parodiando a "El Gabo", el escritor colombiano Gabriel García Márquez.
En los últimos meses de una manera solapada - tal como nos lo confesará un "cura pana" en el oriente del país - en muchas iglesias católicas y algunas cristianas de origen israelita, se preparan cofradías o logias, para avalar una logística de una posible ayuda humanitaria gringa, para la Patria de Bolívar.
Encuestadores u operadores - supuestamente de la Escuela de Estudios Políticos de la UCV y de otras ONG (apoyadas por la USAID) - se han lanzado a organizar grupos y a seleccionar ingenuos cristianos o feligreses, para que se presten a apoyar la ayuda humanitaria venida desde el exterior, sin contar con el aval y aprobación del Estado venezolano (Ni tampoco avaladas por la Cruz Roja o Caritas).
Debemos estar alerta porque ese partido político llamado la CEV, presuntamente conspira en silencio y hasta viola la Constitución Bolivariana, la cual permite la libertad de culto pero no la intromisión de iglesias en asuntos internos o para hacer política contra el Estado venezolano (Art. 59)
Para este fin de semana se anuncia con bombos y platillos, un concierto show en la frontera con Colombia (Cúcuta-San Antonio) para apoyar una ayuda humanitaria en la cual esperan recoger dólares a diestra y siniestra (algunos de dudosa procedencia), supuestamente para apoyar al pueblo venezolano, cuando la verdad verdadera es que la pobreza en la nación neogranadina, ronda por más de un 40 por ciento según cifras de las propias instituciones colombianas y de la ONU.
El mundo de la hipocresía se ha juntado y como dice el refrán, "ellos se buscan para rascarse" y, no precisamente porque tengan sarna o piquiña.
El fantasma de Santander, inspirado en la traición, renace en el vecino país dominado por una oligarquía cipaya comandada por Uribe y su compinche Iván Duque; este último, un personaje nefasto quien sabe mover la colita ante su Emperador Donald Trump.
Los amantes de la paz llamamos a estar mosca con las visitas secretas de supuestos agentes o encuestadores enviados a los santuarios y a las iglesias católicas, cristianas o israelitas del país, dizque para dar apoyo con supuestas ONG.
Si bien tenemos curas y pastores que viven junto al pueblo pobre y comparten sus penurias, angustias y tristezas; también existen curas y pastores serviles, quienes son monitoreados por algunos jerarcas púrpura, golpistas y hasta escuálidos que pululan en la CEV y en otras iglesias evangélicas… ¡Amanecerá y veremos!