El día 10 del fatídico mes de septiembre de 1973, el compañero Allende con informes concretos de inteligencia sobre el golpe de estado en marcha, en avanzadas horas de la noche se dirigió a Palacio acompañado de sus más cercanos colaboradores y un número reducido miembros del GAP, custodios de seguridad.
Estando en Palacio, llamó a todos los comandantes de los diferentes componentes de las FAN, pero ninguno de estos sátrapas quiso atender su llamado, sólo atiende el llamado el Director General de Carabineros César Mendoza, quién recientemente había ascendido al cargo, y le jura lealtad al gobierno y Allende, acto cínico de este esbirro del demente de Pinochet, ya que también se había unido al complot en marcha.
El compañero Allende regresa a la residencia presidencial en Tomás Moro y se reúne con altos dirigentes y Ministros que componían la Unidad Popular para estudiar y delinear una salida al golpe de estado en marcha.
Antes de estos acontecimientos, Salvador Allende se había reunido con todos los comandantes de los diferentes componentes de las FAN, para plantearles que llamaría a un plebiscito al pueblo chileno, quienes decidirían si continuaba o no en el poder.
Este planteamiento hizo vacilar a los golpistas y adelantaron el golpe de estado, para el 11 de septiembre, ya que estaba planificado para el 18 de septiembre día que se conmemora la Independencia de Chile.
El día 11, abandona la residencia presidencial siendo las 7:15am, Allende acompañado del GAP, en un Fiat 125, llegan a Palacio veinte minutos después, el compañero Allende viste una chaqueta de tweed y un pantalón marengo, carga un fusil AK-47 Kalashnikov y el GAP ingresa al Palacio de Gobierno dos ametralladoras y tres RPG-7, además de su armas personales.
La Marina fue la primera en actuar, toma Valparaíso a las 5:30am, Allende emite su primer mensaje anunciando al pueblo la sublevación de la marina, y le pide al pueblo calma, no a la violencia y las armas, solo les pide prudencia.
Comienzan a llegar a Palacio, sus mas cercanos colaboradores, amigos y sus hijas, los esbirros proceden a bombardear la Moneda, Allende les pide que lo dejen solo, solo le hacen caso sus hijas, su secretaria “La Payita”, su médico personal Patricio Girón, y la mayoría se queda junto a él.
Los esbirros le piden que se rinda, y “Este responde: ALLENDE NO SE RINDE MILICOS CULIADIOS”, toma su AK-47, y espera con su casco de minero puesto, junto algunos compañeros del GAP para hacer frente a los “valientes soldados”, la Moneda en llamas y la mayoría de su guardia personal asesinados.
Entra el coronel Palacios junto a una veintena de soldados disparando a diestra y siniestra, en el despacho presidencial lo esperaba el mártir del socialismo, Allende dispara en repetidas oportunidades su AK-47, obsequio de Fidel Castro, y cae acribillado por las balas de los esbirros y asesinos del demente.
¡ALLENDE ESTÁ VIVO AHORA Y SIEMPRE!
elchilenodearagua@yahoo.com
