I.
Venezuela siempre ha sido un objetivo comercial de los gringos. Desde 1929 a 1998 fue proveedor seguro de petróleo y materias primas muy baratos. Pero desde 1999 es objetivo militar porque llegó el Comandante Chávez, puso todo al descubierto y habló de defender nuestra soberanía: recursos energéticos, agua y biodiversidad, las más grandes del planeta. Ahora agregamos las grandes reservas de Oro, metal que con la crisis del capitalismo ha desplazado al dólar de las bóvedas de los Bancos Centrales del mundo. Sabemos que ese cuantioso tesoro se concentra en Guayana y todo hace suponer que: a) los gringos vendrán por él con las armas en la mano y b) las bases militares en Colombia son el movimiento previo para iniciar el asalto.
Bajo posturas interesadas o enfoques inocentes, de mentalidades apátridas o desconectadas de la realidad mundial, esta afirmación puede catalogarse como un exabrupto.
Un argumento baladí es que Guayana está muy lejos de esas bases. Ya que quedaríamos a 25 minutos de un avión de combate y a unos 1000 Km. donde todo puede ser escuchado por las plataformas aéreas.
Los valores del “tablero geopolítico” permiten concluir que Guayana está en la mira de las 9 bases militares gringas en Colombia, como un objetivo inmediato.
II.
El ataque contra Venezuela fue montado con el Plan Colombia (1999), “… de gran ayuda militar y económica para el país vecino, sólo superada por Israel y Egipto” (R. Peñaranda y J. Zuluaga, La Guerra de intensificara” en Colombia-Thema Nº 5, 1999). Plan que, en palabras del senador republicano Paúl Coverdale en el Congreso de EE.UU, tiene como objetivo estratégico controlar a Venezuela ocupando militarmente a Colombia.
En la primera fase:
- ejecutaron la ocupación y con ella la Israelización de Colombia apoyada en 4 bases militares e iniciaron el control con la Colombianización de Venezuela (sicariato, paramilitares, narcotráfico, secuestro) y la Balcanización de América del Sur (táctica de las medias lunas).
- ensayaron agresiones: Plan Balboa (Juego de Guerra), golpe de Estado contra Chávez (11 de Abril 2002), instalación de bases militares en Aruba y Curazao (2006).
En la segunda fase, activaron la 4ta Flota (2008) y el Comandante de las fuerzas navales del Comando Sur, Contralmirante James Stevenson envió un mensaje “claro” para toda América Latina:
“Esta flota está formada convencionalmente por escuadrones o divisiones, que pueden operar sobre “aguas azules” (océanos), “aguas verdes (litorales) o “aguas marrones” (costas o ríos)…” (Mayo 2008, El Nuevo Herald)
La última fase, la actual, es la instalación de 7 bases militares gringas en Colombia, que sumaria 11 de 28 bases gringas en América del Sur. Cuyas metas son:
- controlar inicialmente fuentes energéticas y Oro en Venezuela.
- apoderarse de las fuentes de agua dulce de la Amazonia, con las bases en los ríos Putumayo, Magdalena, Caquetá, Guaviare, Meta y Orinoco,
III.
Todo hace pensar, que después de las bases en Colombia, unas bases en Trinidad, Guyana o Martinica cerrarían el cerco militar y se iniciaría el asalto a los Superpozos petroleros y gasíferos en Monagas, Sucre y Delta, las inagotables minas de Oro en El Callao y las saludables aguas del Rio Caroní.
Ante este peligro inminente hay que aprovechar el tiempo, organizarse y movilizarse nacional e internacionalmente para defender a Venezuela de la agresión gringa.
Todos y todas a movilizarse diariamente con las siguientes consignas:
¡No a las bases gringas en Colombia!
¡Venezuela se respeta!