La oposición venezolana debe cambiar sus estrategias electorales si desea sumar puntos en las próximas elecciones que tienen fecha tope del 26 de septiembre. Es un arduo trabajo que deben realizar en las barriadas populares para tener una oportunidad de avance en las decisiones que ha de tomar el pueblo, en esa fecha tan vital para la patria porque es el momento de reflexión de ir hacia una IV República, una Reforma del Estado y una Constituyente. Tres ápices de una sola realidad.
A pesar del estruendoso sonido que se escucha en las calles a favor del presidente bolivariano, Hugo Chávez Frías que ronda un sesenta y cinco (65) por ciento de aceptación en las encuestas. Existe un grupo de venezolanos quejándose desde las misiones por la mala administración de éstas y que el actual jefe nacional de la educación superior, Gerardo Ramírez, no ha podido superar. Me estoy refiriendo a la Misión Sucre que hay un descontento entre los docentes por las formas de cancelación de sus jornadas de labor docente y muchos de ellos no cobran y los depósitos no aparecen como en el caso de Banfoandes.
Ha llegado el momento de rendirles cuenta a las comunidades a través de la novísima Ley Comunal. Se conocerá el perfil de cada dirigente y su trabajo hacia la revolución, ya basta de una retórica mal sana y el manejo de un discurso político full de muchas falsedades, llego el momento de condensar a la revolución en una sola realidad proyectada hacia un bienestar común, la patria grande de nuestro Simón Bolívar.
Es el momento de colocarse los botines para fraguar los pantanos en los barrios y extenderle la mano a un grupo de personas que desean conocer de cerca de éste nuevo proceso político llamado Socialismo del Siglo XXI. Todavía existen personas necesitadas de algún servicio del Estado, según los proyectos de los alumnos de las misiones que se dedican día a día a ejecutar sus prácticas en las zonas suburbanas de nuestras grandes ciudades.
Estamos en una verdadera protesta democrática para reasumir el país y debilerar sobre el perfil del nuevo Estado venezolano y su conjunto de leyes, que, lo hacen novedoso ante una nueva Ley Comunal que determina colocarnos frente a las grandes urbes del mundo con una tecnología de punto y una demostración de valores que solo nuestra juventud puede demostrar ante una nueva realidad territorial y el bienestar de la familia venezolana que ya puede satisfacer sus demandas alimentarias en los centros de consumo.
Hay una sola respuesta, el amor que podemos sentir los venezolanos hacia nuestra patria y avanzar con nuestros estudiantes a un sentido culto de la palabra y de su perfil ideológico. Ya tenemos la oportunidad de cruzar nuestras miradas con Europa y confraternizarnos con los europeos en la dimensión política que siempre deseó el Generalísimo Francisco de Miranda. Es la hora de avanzar hacia una radicalización de una Constituyente y Reforma del Estado y desde El Alba comprender que es la verdadera globalización de los conceptos mercantiles y dinamizar como consecuencia de estos estudios, la acción bursátil y de aduana en las Capitanías de Puertos y Astilleros Nacionales, es decir los puertos de La Guaira y Puerto Cabello.
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