Cuando apreciamos el
nuevo panorama de Latinoamérica, esa especie de candidez maltratada
que se autodescubre, y dirigimos nuestra visión sobre un hermoso país
que por su estratégica ubicación es considerado el Balcón de
Suramérica,
temblamos de emoción al saber que estamos enrumbados por un buen
derrotero.
Emoción que se acrecienta
al percatamos que la mano que nos conduce, la del presidente Chávez,
reúne las bondades y la firmeza suficientes que, con logros, van
testificando
el progresivo equilibrio social, con justicia. Que con sus incansables
esfuerzos por el desarrollo sostenido y sostenible del País vamos
encaminados
hacia una mejor calidad de vida para todos, venezolanos o no.
Sin embargo, muy
lamentablemente,
un grupo de compatriotas no comparte esa extraordinaria visión de pueblo
soberano, de nación soberana, y reconocemos que se debe a la guerra
mediática, llamada de cuarta generación, en la cual estamos imbuidos
y que ha ido lesionado corazones cuando, por el contrario, sanos y
alegres
debieran estar latiendo junto a los nuestros.
Esa ceguera opositora
se recuesta al pasado de la democracia representativa, que también
calificamos de “bobalicona”, y fue génesis de todos los males que
hoy nos aquejan. Y sus dirigentes, politiqueros de oficio y de la
sinvergüenzura,
muertos por ellos mismos, actúan como zombis que muerden mentes frágiles
o envenenadas angustiándolas con las falacias comunicacionales.
Como elementos dispersos,
sin programas, sin ideales, sin sueños, después de las reiteradas
luchas internas a cuchillo conformaron una mesa de la unidad con la
fragilidad del vidrio por estar elaborada a base de mezquindades
encubiertas,
y solo con miras a la repartición de cargos en el proceso eleccionario
del 26S.
Es una mesa construida
a toletes, clavada con odios y cubierta de estupideces, cojea
pretendiendo
ser democrática y no ha sido más que la extensión de un triste pasado
al que estamos obligados a continuar sobreponiéndonos para existir
dignamente.
La oposición y su desequilibrada “mesa de la unidad”, desconociendo preceptos constitucionales, se lanza a la escogencia de sus candidatos con una deficiente convocatoria a elecciones, y obteniendo pírricas respuestas en algunos municipios: expresan: “El 26 de septiembre elegiremos una nueva Asamblea Nacional. Ese día no va a cambiar el gobierno, pero puede empezar a cambiar la manera de gobernar a Venezuela”.
Nuestra novel
Constitución,
sabio proyecto de construcción de una nueva Nación, contempla como
aspecto fundamental para el crecimiento armónico de las sociedades
labrarnos un amplio destino con el protagonismo y la participación
ciudadanas
Por eso, con la
aportación
democrática de la millonaria militancia del PSUV, en un proceso
transparente
y con nuestros propios medios económicos, escogimos a nuestros
candidatos,
seguros ganadores para afirmar el futuro de todos los venezolanos,
sin excepciones.
La responsabilidad conque
gobierna el líder-presidente Chávez, salvando propios errores y
enderezando
entuertos, contribuye a nuestra felicidad colectiva. Además, viene
organizando la muy desordenada casa como nos dejaron todos los que,
de una u otra manera, durante la cuarta república lograron saquear
toda nuestra extensa y hermosa geografía. Detuvo el pillaje petrolero
de aquella dirigencia merocrática apátrida y sus negociados con las
transnacionales. Le dio un vuelco a todas las contrataciones a favor
nuestra.
Pero, a la vez, no siendo
egoístas, por el contrario somos muy solidarios, sentimos mucha lástima
al ver cómo la gente buena, sana, humilde de la oposición se mantiene
engañada, confundida, y por esa su ceguera –pesado lastre impuesto
a diario por la mayoría de los medios de comunicación privada– están
impedidos para captar la luz de la esperanza cierta.
A solicitud de la
dinámica
oficina OIR de Anzoátegui, del MINCI, con un esmerado equipo, pendiente
de cumplir con su tarea fundamental, informar a las comunidades,
acepté, gustosamente, escribir con respeto crítico, por lo que leerán
a continuación, y que fue publicado (11.07) en un par de diarios de
Puerto La Cruz., que aprovecho someter a su consideración.
Todo gracias, además,
a que estoy inscrito como colaborador de apoyo al MINCI para orientar
a las comunidades, a algunas Misiones, como conferencista, charlista,
participante de foros o conversatorios, en reuniones con las
comunidades.
Recientemente, me invitaron a conversar sobre la independencia y preparé
un trabajo al respecto
Pero, a los recientes gritos opositores de la mesa patiquebrada durante la presentación de sus candidatos, escogidos sin participación de las bases, escuchamos y/o leímos:
*“¡Queremos un
país con futuro a través de la Educación!”,
mostramos la experiencia de un proceso revolucionario de inclusión
en la educación, con gratuidad en estudios y alimentación, con alta
tecnología –computadoras para jóvenes y menores– sin costos a
los estudiantes hacia la formación de ciudadanos ejemplares. Y cero
analfabetismo,
* “¡Queremos un país seguro!”, les recordamos que el descuido por la planificación, en especial de políticas de desarrollo en la provincia, generó la masiva emigración a las ciudades con la consecuente marginalidad y las lamentables situaciones que de ello se derivan. Que cada vez que muere un joven en los barrios víctima de las luchas por las drogas o cada vez que vemos un motín carcelario, o manos agitando cuchillos o pañuelos por entre los barrotes de las celdas, sepan que son parte de ello. Y que grandes esfuerzos estamos haciendo para revertir todas esas nefandas situaciones.
*“¡Queremos una sociedad productiva!”, como si no fueron ellos los que descuidando todas las formas de producción, abandonando las labores del campo, más bien desorganizándolos, causando la devaluación de nuestra moneda y sacando sus capitales en dólares, con una pasmosa flojera, tramposa comodidad, crearon e incrementaron la economía de puertos.
Asuntos que estamos
cambiando
con empresas sociales productivas, iniciando el proceso sin retorno
a nuestra nueva manera de hace socialismo. Esquema participativo y
protagónico,
que no es otra cosa que ser humanistas. Que nos interesa la persona
humana por sobre todas las cosas.
*“¡Sin empleos
no se puede salir de la Pobreza!”.
Y por ignorancia, y para seguir engañando y manipulando, no mencionan
la debacle mundial del capitalismo, con la perdida de millones de
empleos
y de otras prerrogativas sociales y el capitalismo especulativo interno
que ellos mantienen y que impulsarán si llegan –supuesto negado–
a tener mayoría en la Asamblea. Y ni un poquitico mencionan que gracias
a las políticas económicas revolucionarias, impulsadas por Chávez,
su rescate a la OPEP y al valor del petróleo, nos han permitido capear
ese temporal mundial, sin mayores traumas, ni perdidas de empleo. Más
bien, disminuyendo el desempleo y, para más colmo, decretando aumentos
salariales.
* “¡Una mala relación con otros países
causa pérdidas económicas para Venezuela!”, cuando, más bien,
por la acertada política exterior de Chávez, apoyada por y con el
PSUV, donde es su Presidente, recalco, hemos diversificando nuestros
mercados y logrado nuestra soberanía. Respeto internacional.
La mesa de esa unidad
chucuta se tambalea, mientras el PSUV se consolida aportando desde la
Asamblea –donde necesitamos mantener mayoría– para las múltiples
acciones positivas del gobierno revolucionario, que tomaría mucho
espacio
para informar.
¡Patria, socialismo o Muerte! ¡Venceremos!
edopasev@hotmail.com