Un golpe bajo a su adversario Kerry. Un atentado virtual que reemplaza al que Bush y los suyos, después de largas deliberaciones, no se han debido atrever; tan burda hubiera resultado la treta...
Una de dos, o Bin Laden es un socio de la Casa Blanca actual, como atestigua la salida de su familia en avión el día siguiente al 11-S cuando ningún otro vuelo se autorizó ese día, o es un montaje más a los que esa Administración mafiosa tiene acostumbrado a su país y al mundo entero.
No es posible de otro modo que este personaje de cómic y esperpéntico, que viene campando por sus respetos desde el principio mientras sus ficticios perseguidores cometen atrocidades donde está el petróleo, ahora se descuelgue con semejante baladronada... Pero ¿cuando ha avisado alguien que iba a cometer un atentado tan mortífero como el de 11-S en Nueva York?
Estas patrañas persistentes no debieran engañar ya a nadie que tenga uso de razón. Claro que hoy día un niño estadounidense de dos años es capaz de manejar una play station mejor que su propio padre, pero lo que llamamos uso de razón yo creo que en el ciudadano medio del gran país americano, para lo importante, llega anormalmente muy tarde. Por eso los más despejados se atreven a abusar de él con tantas, tan frecuentes y tan descomunales imposturas...