Menos de dos años le quedan al Gobierno para caerse a trompadas con cuatro monstruos que han crecido, sin que hayan sido efectivas las medidas para abordarlos: el hampa, el déficit de vivienda, los problemas del Metro y la quinta columna enquistada dentro de los espacios de poder, responsable en buena parte de que los otros tres se hayan agudizado tanto.
Lloviendo sobre mojado, insistimos en la necesidad de que el problema de la inseguridad no puede ser visto exclusivamente desde el ángulo que justifica la existencia del mismo por las injusticias sociales. Hace falta una visión integral que considere la inoperancia del Poder Judicial, la ausencia de condiciones dignas en las cárceles y medidas drásticas contra la actuación de los hampones. La infeliz decisión de permitir a motorizados, delincuentes entre ellos, circular por las vías rápidas, ha sido la causante de que se desplacen con todo desparpajo por dondequiera que se les antoje y sin que nadie se atreva a confrontarlos.
El de la vivienda no se resolverá mientras sigamos pensando que a la gente hay que entregarle su casita, con corotos incluidos, sin que el beneficiario asuma su cuota de responsabilidad para con un Estado extremadamente dadivoso. El problema va más allá de discutir si un apartamento debe tener uno o dos baños o si el jardincito afuera hace falta o no. Jamás se alcanzarán metas grandes con una visión tan chiquita. Sobre el Metro no vamos a abundar mucho para no redundar. Rogamos porque el nuevo presidente de la compañía tenga mejor tino en su gestión, para que Caracas detenga su insoportable tránsito hacia la caotización.
La dañina quinta columna la conforman los adecos saboteadores que siguen campantes en sus puestos de trabajo; son los funcionarios de quince y último que guardan la conciencia ideológica en la cartera; son los ineficientes que no piensan en que trabajar en la administración pública es hacerlo por el país. A todos ellos, hay que identificarlos y execrarlos para que no sigan haciendo más daño. Detrás de las cuatro patas de esta mesa desestabilizadora, actúa agazapada la oposición, como buitre contando los días que faltan para diciembre 2012.
Mlinar2004@yahoo.es
