Pudiera calificarse
sin lugar a duda, Titán a Domingo León, quien fue capaz y contó
con su fuerza espiritual para enfrentar en simultáneo disímiles adversidades
pero como dice el poeta, “sin perder la ternura” y antes las contrariedades
de la vida, mas bien Domingo León, irradiaba optimismo, confianza,
vigor y valor.
Quizás aún
no se ha dicho todo ni se escribirá lo suficiente para interpretar
cada hora, cada día, cada año, cada batalla en la vida de esas grandes
personalidades que ilustran la historia universal. Algunas de estas
individualidades saltan a la palestra pública al cabo de los años
por la magnanimidad de las o los historiadores, de las y los activistas
políticos, quizás son el nutriente doctrinario por su obra de decididos
hombres y mujeres quienes se atreven a irrumpir en la historia con ideas
propias y eslabonadas a ese quehacer heredado y que cada obra, cada
accionar, está por allí como las notas musicales que están el espacio
y el artista las baja a su instrumento musical.
Quedó
parapléjico a sus 24 años, en el esplendor de su juventud, por la
responsabilidad represiva de los regímenes adecos – copeyanos y del
otro partido de la burguesía: Fedecámaras. Muere a casi cumplir 73
años. Batalló por su vida y su vida fue y es un juicio para quienes
traicionaron, para los débiles y vacilantes, para los que no tuvieron
confianza en sí y confianza en el pueblo, para las y los que decayeron
víctimas de sus propias confusiones y engreimientos.
Para los efectos
de contar disímiles facetas de la vida de Domingo León pudiera el
próximo MPPJE contar también con los testimonios de personas que lo
conocieron en distintas etapas de su vida, desde la adolescencia hasta
su adultez, tanto en Cuba como en Venezuela para así confeccionar la
Exposición de Motivos y los Considerando de la Orden Domingo León
en sus distintas clases para reconocer la obra de jóvenes y estudiantes
en los distintos ámbitos de su quehacer personal y profesional, entre
otros atributos dignos de ser reconocidos. De Venezuela pudiéramos
nombrar a varias personas, sin menoscabo de otras, que fueron también
muy consecuente con Domingo León y que de no aparecer en este listado
no se le resta importancia: Elías El Juri, Ángel Moro, Luis Mendoza,
Fernando Soto Rojas, Julio Escalona, Nicolás Maduro, Paúl del Río,
Trino Alcides Díaz, Nora Castañeda, Lídice Navas, personal de la
Embajada de Venezuela en Cuba, personal de la Cancillería en Caracas,
así como Roberto Hernández ex Ministro del Trabajo, Clodosvaldo Russian,
entre otras personalidades.
Las anécdotas
están allí. Sus libros están allí; es más, hay preparativos
para un documental.
Quienes dirijan
el próximo MPPJE tienen la palabra para acceder a tan histórica, pertinente
y oportuna Orden Domingo León.