Esto me lo envía un querido amigo historiador, que corrobora todo lo que se ha venido diciendo desde hace tiempo sobre Miguel Henrique Otero. De ahí toda la histeria desbocada de este horrible parásito porque lo han llamado hijo de puta.
Vean esta la nota: “Para las navidades de 1.974, durante el primer gobierno de C.A.P y con las relaciones diplomáticas suspendidas, nos permitieron viajar en un vuelo especial de "VIASA" a la República de Cuba a un grupo de educadores de la izquierda revolucionaria, entre ellos el Rector de la UCV para ese entonces. Nos acompañaron también muchos periodistas, brillantes intelectuales y de sobremanera viejos columnistas del Diario "EL NACIONAL" quienes deseaban compartir con su caro amigo Miguel Otero Silva, quien tenía tiempo viviendo entre la Habana y la hoy desaparecida URSS. En el vuelo también iba María Teresa Castillo con su supuesto hijo Bobolongo y su travieso nieto, quienes iban a lo mismo, ver a MOS.
Nos hospedamos en el Hotel Nacional y durante la cena navideña tuve el privilegio de compartir con valiosos hombres y mujeres de la letra nacional, entre ellos Anibal Nazoa y su distinguida esposa.
Mientras degustábamos los palos y el sabroso pernil teniendo como fondo musical el guanguacó y la rumba cubana, cuando a las altas horas de la noche, bajo la protección del Dios Baco, varios del grupo que formaban parte de nuestra parranda sacaron a relucir que M.O.S no era el padre biológico de Bobolongo y que a M.T.C nadie la llegó ver preñada y que a Bobolongo lo trajeron recién nacido de un país de la extinta U.R.S.S.
Bueno, creo que eso es más que suficiente y que el Dios ( BACO ) me agarre confesado. Todo indica que Bobolongo es en realidad un hijo de puta. Practíquenle el ADN y verán.
Atte. Prof. EE MM.”
jsantroz@gmail.com