Es necesario, el uso racional de las aceras por los ciudadanos y evitar, que, éstos transiten por la calle. Todo lo podemos visualizar en el casco urbano de la Isabelica, Municipio Rafael Urdaneta del Estado Carabobo, Venezuela. Hay que trasladar a un colectivo hacia el Sur y evitar el colapso de los colectivos en el eje costero, hay que trasladar a la población hacia el sur, donde estarán las nuevas fuentes de empleo y, donde existen respuestas serias de vivienda, ya sean privadas u oficialistas. La inversión debe ser en serio y necesitaremos de la creatividad de nuestros arquitectos. La familia venezolana, debe acostumbrarse a su hábitat y conformar sistemas de producción autónomos que le permitan su sustentación y, así tener la oportunidad de tener su pequeña empresa para originar ahorros que le permitan crecer. El desplazamiento de colectivos hacia zonas suburbanas de las grandes ciudades origina un verdadero caos sanitario, aupada por una evasión fiscal de un sesenta por ciento. El Estado, tiene un costo administrativo elevado por la burocracia y el mantenimiento de personas sin oficio que, dependen del salario de sus mujeres, que, vilmentente son explotadas. Sin gozar de seguridad social, desplazándose hacia centros sanitarios laborables como el Ipasme, lo que viene obligando a algunos docentes no nivelarse en este sistema por razones obvias y entendibles.
La nueva república, constituye un apostolado para darle continuidad al pensamiento del Libertador Simón Bolívar. Su ideario constituye un excelente instrumento para defendernos contra los trogloditas del pasado, que, hicieron mella en la Coordinadora Democrática y, ahora en la Mesa de la Unidad Democrática. He regresado a la historia para lograr algunos datos que sirvan de base a una descripción cultural dada y una religiosa, como una porción del fundamentalismo católico- romanista y protestante- baptista y desde allí describir la identidad de los venezolanos. Esto, llevo a ejecutar algunos procedimientos jurídicos y sociales de carácter costumbrista en nuestra sociedad antañona.
La sociedad civil debe ser interpretada por los ciudadanos, en pleno ejercicio de sus atribuciones legales para ejercitarse en el proceso democrático y normalizar sus pasos en esta estructura económica. Y lograr una meta presupuestaria en sus quehaceres particulares. Por lo tanto, es necesario captar fuentes de inversión para que una inmensa masa laboral inactiva se inserte en las mesas de trabajo y logre ubicarse en una posición estabilizada.
La crisis actual local, constituye un absurdo porque se vienen articulando un conjunto de proposiciones absurdas que crean dudas en el sentimiento popular. Y en realidad, lo que se desea es obtener un resultado positivo de los hechos, que, nos permita predecir lo deseado y creado por nuestra sociedad, es el anhelo de toda una colectividad, solamente es el deseo de vivir mejor y estar estabilizados en la experiencia que nos acontece.
De allí, la importancia de los jueces civiles especializados. Como los dedicados al área comercial. El criterio de cuantía es fundamental para un juzgado, para así determinar el valor del juicio, evitando controversias en la intromisión de los poderes y, quienes son los interesados. La competencia territorial se justifica por razones geográficas y, ningún individuo esta autorizado para invadir parcelas y construir grandes galpones frente a las propias autoridades, como sucede en Parque Valencia.
Hay que leer la formación de las grandes ciudades y consultar a los sociólogos y psiquiatras que ha hecho Internet con nosotros junto a sus múltiples juegos, hemos dejado de identificarnos con la realidad y nos hemos convertido solo en un multiplicador de palabras y un creador de ranchos. El hombre se encuentra inestable por las fuentes de empleo y la poca inversión industrial para trabajar a campo abierto. Todo, no ha terminado. La democracia y la revolución se coadyuvan en una mesa de trabajo, no procreando vagos y seres que de manera incontrolada se van neutralizando hasta conformar ficciones y esperanzas, que, solo, su imaginación admite. Estamos en un mediatismo que, no da paso a la reflexión y la realidad se torna mentira, en una ficción.
Estamos creando hombres con una inteligencia artificial y totalmente robotizados que, no aprovechan los textos editados por el gobierno bolivariano de Venezuela y, solo se dedican a explotar a sus mujeres con un puesto de telefonía móvil de alquiler y esperar que el Estado los dote de todo, hasta un lugar en una clínica. Sinceramente debemos adecuarnos e investigar la nueva ruta de la idiosincrasia criolla y avanzar hacia el hombre racional.
La ciudad y sus calles deben abrirse al conductor y a la ciudadanía, los buhoneros deben estar ubicados en lugares específicos que la alcaldía autorice, no podemos permitir la anarquía en las zonas urbanas.
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