Nuestras fronteras

Analizar la política fronteriza venezolana siempre ha sido muy difícil, pues nuestras clases dominantes y sus gobernantes, con muy contadas excepciones, han claudicado traidoramente ante los intereses de nuestros vecinos, quienes además han tenido el apoyo de los poderes neocoloniales de las grandes potencias. La forma geográfica de la Venezuela que derivó directamente de la Capitanía General luego de la independencia, era muy parecida a la del actual estado Guárico, con una superficie de unos 2 millones de kilómetros cuadrados. Hoy, luego de los despojos ocurridos, tenemos sólo 916 mil 50 kilómetros cuadrados, lo que significa que hemos perdido o entregado la mitad del territorio que nos correspondía.

Nuestros gobernantes y sus partidos, incluso algunas organizaciones “revolucionarias”, han tratado de justificar su entreguismo con la excusa de alguno de los internacionalismos existentes: socialdemócrata, proletario o bolivariano. Siempre hemos estado más preocupados de los derechos de nuestros vecinos, a quienes catalogamos de hermanos, que de los derechos de nuestra nación. Somos más internacionalistas que nacionalistas, lo cual es un contrasentido. Ningún país del mundo traza su política exterior de fronteras, en función de los intereses de aquellas naciones colindantes que aspiran porciones de su territorio o que reclaman derechos de cualquier tipo sobre su geografía. Venezuela es única en este aspecto.

Al anterior dislate debemos añadir nuevas dificultades a nuestros justos reclamos. Colombia, al igual que varias naciones sudamericanas, ha firmado acuerdos con países asiáticos como China. Para salir al Pacífico con nuestro petróleo se habla de un oleoducto por suelo colombiano. El Pacífico ya suplanta la preeminencia atlántica de los últimos dos siglos. Colombia tiene un TLC con EEUU y los acuerdos con Santos en Santa Marta nos obligan a un tratado comercial con ese país. Cuba sigue priorizando sus relaciones con Colombia, que la hicieron abandonar a las FARC hace mucho tiempo, y nos presiona en ese sentido; los artículos de Fidel no lo esconden. Los intereses de nuestros aliados favorecen la posición de Colombia en su disputa sobre el Golfo. Otro tanto ocurre con Brasil y el CARICOM y nuestro reclamo a Guyana del Ezequibo. 

  lft3003@yahoo.com



Esta nota ha sido leída aproximadamente 2315 veces.



Luis Fuenmayor Toro

Médico-Cirujano, Ph. D., Ex-rector y Profesor Titular de la UCV, Investigador en Neuroquímica, Neurofisiología, Educación Universitaria, Ciencia y Tecnología. Luchador político.

 lft3003@yahoo.com      @LFuenmayorToro

Visite el perfil de Luis Fuenmayor Toro para ver el listado de todos sus artículos en Aporrea.


Noticias Recientes: