Delfina tiene ahora todo a pata´e mingo así que no hay excusas para meter la pata, a menos que ella sea una malagradecida, que no lo parece.
No puedo decir que hasta el gato votará por Chávez porque de cuatro gatos de los que tengo conocimiento uno de ellos se rajó, el gato briceño; “Reina” y “Felipe”, los dos gatos de Sergio, y la gata de Margot, que no sé cómo le llaman, son los otros tres aludidos gatos chavistas y, hasta “Gringo José”, el perro del camarada Pacheco, es chavista.
“Bartolo” era otro gato famoso pero desapareció del mapa. El loro de Toni no vota porque es menor de edad pero ya se le ve que es nuestro porque se la pasa diciendo ¡Uh, Ah!
¡Ah, olvidaba deciros que el gato es un animal y el perro también!
Mas, hay personas que se comportan menos inteligentes que los animales; que cada quien saque sus cuentas.
Pero, volviendo a Delfina, lo lógico es que ella vote por Chávez porque sin Chávez ella no tendría tantas facilidades para ejercer tan bueno, sus derechos ciudadanos.
Fue a partir de la Asamblea Nacional Constituyente impulsada por Chávez, cuando se pudo elaborar la actual Constitución De La República Bolivariana de Venezuela que consagra el Poder Electoral sin el cual la gente del barrio tendría que ir a votar al centro de la ciudad y la mar de las veces se abstenía de ir, por las dificultades de transporte y otras trabas, deliberadamente armadas para joder a los pobres.
Aplaudo al Consejo Nacional Electoral-en sus cuatro Rectoras: Tibisay, Sandra, Socorro y Tania-por su gestión tan buena.
(La que más me gusta es Tibisay).
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