El mercado es un término impelable
en los discursos políticos y económicos de hoy, frases como: economía
de mercado, corregir las fallas del mercado, socialismo de mercado, los
precios los fija el mercado, etc.; el mercado como sujeto, el mercado
como justificación, el mercado como centro de las políticas y de los
discursos; un decir que vacía, deja lagunas, es como tratar de llenarse
de algodón de azúcar, sabe y emociona pero llena de aire. Un palabra
que esconde, que burla, legitima e impone un modelo con un modo de
relaciones sociales de producción, con un sistema de valores todos bajo
una ideología, la ideología capitalista -reproducir, maximizar y
acumular capital-; en sus fases liberal, en su fase tregua “Estado de
Bienestar o Keinesiana”, en su fase preparatoria Monetarista y ahora en
su arremetida fase Neoliberal.
Veamos, todos estaremos de acuerdo en que el mercado es un espacio
-físico y ahora también lógico- donde se encuentran seres humanos para
el intercambio de bienes y servicios, genéricamente para el
intercambio de valores; podríamos decir que siempre ha estado en la
historia humana reciente -12 mil años, considerando los 300 a 500 mil
que datan del Homo Sapiens- en menor o mayor medida como parte de
su mundo social; en sociedades autosuficientes recolectoras, nómadas o
agrícolas y sedentarias, donde el mercado tuvo poca incidencia en la
provisión de los medios de vida, fue quizá un espacio para lo
suntuario, lo curioso, lo personal, un evento económicamente marginal;
con la industrialización desenfrenada con sus promesas de paraíso, el
consecuente desarrollo de la tecnología expresado en una mayor división
de trabajo, con una creciente separación de los procesos de producción y
consumo, con el aumento del trabajo asalariado -en numero y proporción-
y con la expansión y hegemonía del Capitalismo, el mercado se ha
convertido en el centro económico, político y geopolítico del día a
día de cada país.
Alerta, alerta!....
El mercado se ha transformado en un
hecho social, es decir , ha trascendido del ámbito de lo económico al
ámbito de las relaciones sociales , es un fenómeno social que
condiciona y determina al ser social desde su pensar , sentir y hacer,
se ha “naturalizado”, se ha “cotidianizado”, se ha mimetizado, formando
parte de nuestro ser social, es una especie de Allien parásito alojado
en nuestro cuerpo social.
En esta mimetización, decir frases como “imposiciones del mercado” o “los precios los fija el mercado” pasan como la brisa, desapercibidas y hasta refrescantes. Pero veamos cuando hablamos de imponer o fijar,
nos referimos a acciones que son exclusivamente ejecutadas por humanos,
por personas de carne y hueso, pero el mercado es un espacio lleno de
cosas, por lo tanto es una cosa u objeto, carece de esta cualidad de
sujeto, siendo asi esta frase pretende humanizar a una cosa, reificar,
así en esta expresiones que suplanta al sujeto, se busca pasar por
debajo de la mesa al ¿Quién? que está detrás, con sus intereses,
subjetividades, valores y moral -bajo el paraguas de una ideología-,
enmascarando las intenciones y motivaciones verdaderas que definen el
¿por qué? y el ¿para qué? de su accionar. Tal vez debería agregarse
cada vez que se habla de mercado el adjetivo capitalista, dado su
carácter hegemónico, dando indicios el sujeto implícito detrás. Decir
sólo mercado es reproducir inconscientemente una ideología, pues se
contribuye a promover y expandir en la práctica al mercado capitalista
como hecho social hegemónico. Como dice mi amigo el profe al que
ideologizar el discurso.
Debemos estar alerta, es necesario releer nuestras teorías para descubrir “estas cabras mochas”,
reinterpretar y cuidar cada frase con la que elaboremos nuestros
discursos, pues podríamos en el decir, pretendiendo asumir una postura
técnica, presumida de neutral, estar reforzando la ideología
capitalista. Es más esta atención debe enfocarse también a nuestros
sentimientos y emociones, a nuestras prácticas y acciones, esta lógica
de mercado capitalista como hecho social hegemónico está en todas
partes... Tal vez neguemos lo con conoceremos y nos asuste al principio.
La lucha sólo es posible al des ocultar las contradicciones o
antoganismos del capitalismo, afuera y adentro, donde quiera que se
encuentren, por mas que se disfracen. Tomar consciencia es
conocimiento, conocimiento es acción y efecto de conocer, en fin es
despertar, y este es el primer paso para avanzar....
El socialismo Venezolano y Bolivariano, es la salida, pero hay que
construirla en paralelo viviendo una realidad ineludible, Aquí y Ahora,
a la vez que trasformándola.
Consciencia crítica con humildad, constancia y trabajo sin perder el horizonte....
Viviremos y venceremos!
Pa' lante comandante y compatriotas!
alvin.lezama@gmail.com