Hace 14 años que vivimos lo mismo, abusos masivos por parte de los medios de comunicación privados, Globovision, Venevision, Televen, Tal Cual, El Nacional, El Universal, y decenas, sino cientos de otros medios, de radio, televisión, y periódicos. En cualquier país “desarrollado” del mundo - (¿No es esto lo que la oposición busca? ¿Que Venezuela sea como los países desarrollados?) - la mayoría de estos medios hubieran sido cerrados, o por lo menos sancionados con gigantescas multas, por causar zozobra y violencia en la población – pero aquí no quiero criticar a Conatel, es decir, si Conatel ha permitido que estos medios enfermen las mentes de una parte importante de la ciudadanía, en particular a los seguidores de la oposición, me imagino que debe existir alguna muy importante razón. Entonces, ya que supongo que este es el caso, otra vez me puse a pensar, ¿Qué se puede hacer para disminuir el nivel masivo de zozobra, miedo, rabia, odio, y paranoia que existe en las almas y mentes de millones de venezolanos y venezolanas del sector opositor?
Aquí estoy hablando en serio, no es un chiste.
Ya lo había mencionado en otra ocasión, y nadie me paró, como si la idea fuera un chiste, pero no es un chiste. La verdadera verdad, y creo que todos los chavistas lo sabemos, es que hay millones de venezolanos y venezolanas que están enfermos psicológicamente, y eso, porque nosotros mismos lo permitimos, ¿entonces, le culpa de quién es? Nuestra. Somos nosotros mismos, los chavistas, quienes permitimos que Conatel permita que se perpetúe el abuso mediático, nadie más, entonces nos toca a nosotros resolver y rectificar. Yo, por mi parte, he hecho lo posible para hacer ver a gente de la oposición que lo que tienen en la mente y el alma no es nada bueno, es distorsionado, y nefasto para su salud mental, y para sus familias, y creo que muchos chavistas lo están haciendo, pero no es suficiente.
Hay demasiados enfermos.
En serio, creo que es tiempo de empezar, los más rápido posible, la Gran Misión Por la Paz, o algo así, un programa nacional de ayuda psicológica. El programa también pudiera ser incorporado a la Gran Misión a Toda Vida Venezuela, ya que esta misión tiene que ver con la reducción de la cultura de la violencia. El odio es una forma de violencia. También pudiese ser integrado al movimiento por la paz que nuestro querido presidente Maduro anunció hace poco, pero no conozco los detalles de este movimiento todavía.
He hecho algunos cálculos.
De todos los que votaron el 14 de abril, alrededor de 7.3 millones votaron por Capriles. Digamos que 3 millones de aquellos están notablemente enfermos, y que se empieza tratando el 10% de estos 3 millones, es decir 300,000 personas, una vez al mes, durante 3 meses cada uno. Se necesitaría contratar alrededor de 850 psicólogos en todo el país para empezar el programa, y el presupuesto, excluyendo la publicidad y la administración del programa, seria (a 400 BSF la consulta, pagado por el gobierno) de alrededor del 360 millones de bolívares, algo razonable, en mi humilde opinión, para curar a buena parte de la población de esta nefasta enfermedad. Esos 300,000 enseguida pudiesen ser los voceros para el resto de los opositores que todavía andan enfermos, y poco a poco, de allí se va reduciendo el número de personas llenas de odio irracional y rabia enfermiza, y la violencia – y esto ayudará a contribuir a la paz que todos buscamos.
¿Les parece?
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