¿Magnicidio por cometer, magnicidio por cobrar? ¿Dos pájaros en la mira?

UNO

El periodista Grilla Gallardo  lo señala en su Blog “La Colmena”¨ y José Vicente Rangel lo denuncia en su programa  “José Vicente hoy”(Los Confidenciales): Los agentes y criminales a sueldo de la CIA que operan en Chile, Washington Moreira (con credencial de la DEA) y Todd Porter (del FBI), son los encargados de gestionar el traspaso de recursos clandestinos para llevar a cabo el asesinato de Nicolás Maduro y Diosdado Cabello”. A esta denuncia hay que pararle por la gravedad de la misma. No son Tom y Jerry, son dos tenebrosos agentes de la CIA, agencia de inteligencia tristemente célebre y recordada que tiene un largo historial de crímenes en la tierra de Salvador Allende. Así lo testimonian los asesinatos de el General René Schneider, el General Carlos  Prat, el Canciller Orlando Letelier y el cantautor Víctor Jara  y miles de victimas de compatriotas chilenos desaparecidos y asesinados, ocurridos en unos de los más cruentos golpes que gobierno y país alguno haya sufrido.

DOS

Con estos señalamientos se hace más que sospechosa la visita de CAPriles Radonski a Santiago de Chile, por ello es necesario hacerse las siguientes preguntas. ¿Fue a ponerse en contacto  sólo con los principales dirigentes de la derecha chilena, o también se reunió con los agentes gringos de la CIA Todd Porter y Washington Moreira? ¿Fueron fortuitas o casuales las declaraciones de la alta funcionaria Samantha Power  contra Venezuela? ¿Recibió el “arrechito rosado” las remesas de dólares y también la información y directrices del imperio destinadas a tan macabro fin? Podíamos agregar muchas preguntas más, pero sería interminable este artículo.

TRES

Veamos  los señalamientos que hace Grimaldi: “Se trata de crear un  “ambiente de caos social” y desorden generalizado, creado artificialmente. Este hecho podría provocar un vacío de poder para presionar una intervención militar, apoyada por la oposición, por lo que la CIA ha redoblado sus contactos con mandos militares para sondear posibles reacciones. Provocar un vacio de poder para presionar una intervención militar . Agrega que en caso de fracasar el magnicidio, el siguiente objetivo sería Diosdado Cabello, “atribuyendo el hecho a Maduro y al servicio de inteligencia iraní, sobre la base de la versión ampliamente difundida en el país y en el exterior de que existiría una pugna por el poder y el liderazgo del movimiento bolivariano”. También cita en su espacio “La Colmena” : “el financiamiento de la operación tendría su origen en el narcotráfico y se señalan los nombres de algunas empresas con presencia en Chile, Bolivia, Perú, Colombia y una con sede en Atlanta, Estados Unidos”  Remenber Nicaragua y “los Irán-contra” la Revolución Sandinista.

 

CUATRO

Esta denuncia hay que tomarla en cuenta, sobre todo si corre peligro las vidas del presidente Nicolás maduro y el presidente de la Asamblea Nacional Diosdado Cabello, las dos figuras más prominentes de la Revolución Bolivariana. No se trata de sembrar pánico ni temor en la ciudadanía; pero tenemos la tendencia a subestimar  y minimizar este tipo de denuncia. Así pasó con la compras de los aviones bombarderos  por parte de la derecha opositora para sembrarlos en alguna base militar gringa en  Colombia (Ya están 5 en alguna base muy cerca de la Goajira, en la frontera) Me imagino que nuestros organismos de inteligencia están montados en este asunto y la seguridad de ambos lideres debe ser aumentada o reforzada, no vaya a ser que nos agarren desprevenidos o caigamos por inocentes. Hay que recordar constantemente el pensamiento de Bolívar: “Parece ser que los Estados Unidos de América,  plagaran de hambre y miseria el continente americano, en nombre de la libertad”. Del imperio se debe esperar todo, sobre todo cuando dicen una cosa y hacen otra. La crisis económica y la disminución de sus  reservas petroleras los tienen desesperados. No debemos olvidar nunca lo sucedido con países como Irak, Libia, Afganistán y Siria. La bestia está despierta y no solamente muerde, también traga o embucha. Ojo Pelao, presidente Maduro, póngase mosca.



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Antonio Fernández Lunardi


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