Artículo escrito el 08/12/2013 05:00:00 a.m.
Como dicen en el CNE, “la mesa está servida” para que millones de venezolanos acudan a las casi 40 mil mesas en todo el país. Estas deben ser las elecciones Nº 19 celebradas en Venezuela durante los 15 años de la V República. Ningún país del mundo ha tenido en tan poco tiempo un ritmo de votaciones tan endiablado, ni en tantos años ha habido uno más observado y auditado. Siempre ha demostrado incuestionablemente su transparencia y la seguridad en el voto. Pero como también se dice, tampoco este sistema electoral es monedita de oro para gustarle a los perdedores. Aunque han sido escasas las denuncias con fundamento sobre irregularidades o inconsistencias numéricas, en las elecciones del 14-A se pasaron de maraca, pues hubo quienes llamaron a sus partidarios a insurgir contra los resultados, con saldo de 11 muertos, y se obstinaron en desconocer la legitimidad del Presidente electo.
Ahora les preocupa que a la tendencia natural a la abstención en votaciones locales, como las de hoy, se sumen los efectos de esa permanente prédica. Fueron los dirigentes de la oposición, comenzando por su principal dirigente, quienes denunciaron el carácter viciado de las elecciones del 14-A y al mismo tiempo al sistema electoral como fraudulento y llamaron a sus seguidores a no creer en el CNE. Y si así pensaban hasta hace apenas siete meses cuando hicieron todo lo posible por desacreditarlo. ¿Cómo es que ahora recuperaron su confianza en el Poder Electoral, en sus organismos y directivos con Tibisay Lucena a la cabeza? Es lógico que muchos de sus seguidores entre quienes sembraron esa perversa idea estarán desestimulados para ir a votar. Quien siembra viento recoge tempestades.
Opiniones en ese sentido han subsistido. “Desde esta perspectiva, la respuesta lógica del elector de la oposición sería abstenerse de participar en una nueva burla del régimen para seguir legitimándose en Venezuela y ante la mirada indiferente de la comunidad internacional...”. Otro escribe: “Tampoco votaré. ¿Para que votaría quien no está con el oficialismo ni con sus oposiciones?”. Y agrego, y se creyó el cuento del fraude en abril-14.
Les resultará cuesta arriba denunciar fraude alguno. La de hoy no es una elección, son 337, en 337 jurisdicciones distintas, con problemas y particularidades variopintos. Si por ejemplo ocurriera, como puede suceder, que los opositores ganaran 100 o más alcaldías, ¿quién les creerá si dicen que les hicieron trampa en las que perdieran?
Derrota bolivariana
No es el día más apropiado para que me ocupe de los recién finalizados Juegos Bolivarianos, pero de alguna manera había advertido sobre lo que finalmente ocurrió en Perú. ¿Qué hizo Colombia para dar ese gran impulso a su deporte y ganarlos por primera vez desde 1938 cuando los JDB se iniciaron en Bogotá? ¿Y qué hizo mal o dejó de hacer Venezuela para perder 61 oros con Colombia y ser desalojado del primero? ¿Cómo es que la esgrima, que en juegos anteriores ganaba 12 primeros en igual número de competencias, ahora bajó a siete? (Ruperto Gascón, entrenador del olímpico Limardo, explica que no hubo un plan para desarrollarla). ¿Cómo es que los vecinos ganaron 414 medallas con 508 atletas (promedio de 0,81 medallas x atleta) y Venezuela 457 con 735 (promedio de 0,62)? ¿Cuánto invirtió Venezuela en su delegación y cuánto Colombia? Interesante saber cuánto fue el costo por atleta.
No son satisfactorias las explicaciones de la presencia de países invitados, decisión que al parecer fue objetada por Venezuela y Colombia, que nos arrebataron más medallas que a ningún otro país. Fue un factor, pero solo eso.
Percepción de inseguridad
Los esfuerzos del Ministerio del Interior para reducir las cifras de delincuencia han comenzado a dar significativos frutos, y ese combate recibirá un impulso importante en Petare y Chacao con el funcionamiento del Sima, para detectar y rastrear potenciales hechos delictivos. De la última semana de noviembre de 2012 al mismo período de 2013, el secuestro disminuyó 51%, los crímenes 24,7%, y el robo de vehículos pasó de 755 a 567. Pero cualquier encuesta seguirá revelando que la gente ubica la inseguridad como el primer problema, es un asunto de percepción. Como se ha demostrado estadísticamente, Venezuela es el país de América Latina donde la percepción de inseguridad tiene un porcentaje superior al de la realidad. La causa habrá que buscarla en los medios. Seguir reduciendo la criminalidad es tarea que está enfrentando con éxito el ministro Rodríguez Torres, pero la percepción tiene otros factores.
Transparencia Internacional se puede hacer confiable cuando nos informe quiénes en Venezuela son consultados sobre sus opiniones de la corrupción en Venezuela. Hasta donde sé, empresarios y “expertos” opositores.
La arrogancia de César Farías es de tal magnitud que tras aceptar que él fue el responsable de la no clasificación de Venezuela al mundial de fútbol, dijo que ¡repetiría todo lo que hizo en el proceso eliminatorio!
La exaltación al Salón de la Fama del Atletismo venezolano de Pachencho Romero permitirá saber a tantos que acuden al estadio que lleva su nombre, en Maracaibo, que él fue ganador de lanzamiento de jabalina en las primeras olimpiadas nacionales (dic 1934) y medalla en los Bolivarianos de Bogotá (1938). Otro veterano exaltado fue Andrés Miranda, presidente de la FVA y organizador del primer campeonato nacional de atletismo (agosto 1948). Eran años en que se arañaban los recursos para hacer deporte.
El promedio de la pobreza en América Latina se estabilizó, mientras Venezuela fue el país que más la bajó el año pasado: de 29,5 a 23,9, y la indigencia de 11,7 a 9,7. ¿Llegará un día cuando la oposición crea en las cifras de la Cepal?
Después de tiempo sin recibirlos, me llegaron de Monte Ávila varios libros, entre los cuales quiero destacar: Conversaciones con Walt Whitman, traducción y selección del poeta Rafael Cadenas; Simone, premio Rómulo Gallegos, del puertorriqueño Eduardo Lalo; Breviario del estremecimiento, relatos de varios autores; Sobre la lectura, de Marcel Proust; la novela Viajes de Miguel Luna, del cubano Abel Prieto, y la selección Los pueblos del mundo unidos con Venezuela. Y de otros sellos editoriales: El disposicionero en el Kiosco Veraz, lógicamente de Earle Herrera; De Cabure a La Azulita, sobre las guerrillas de 1960, de Alirio Almao; La participación ciudadana en salud en Venezuela, de José León Uzcátegui, así como Y nos comimos la luz, ilustrado con fotos, de María Isoliette Iglesias. Y por aproximarse la Navidad voy a alternar una historia del Mossad, poderoso y criminal servicio de espionaje israelí, para entrarle a Los Reyes Magos, el nacimiento de Jesús y la estrella de Belén (Galac), de Vladimir Acosta.
Hace poco me cortaron la luz, debí pagar de inmediato para restablecerla, pero solo fue posible por una llamada en la noche al ministro Chacón. Oportunamente había cancelado ese servicio en Mercantil hasta el 29 de diciembre de 2013. ¿Qué tal?