A no ser por una ingenuidad sin limites habría que aceptar que pueda existir alguien que deje de preguntarse a qué se debe el que, cuando por fin la derecha acepta participar en el diálogo que ya llevaba meses siendo convocado por el Presidente Maduro, el ala de la ultraderecha convertida en terrorista sigue provocando destrucción y muerte y con planes para incrementar acciones como las que hemos visto en los últimos días con la quema de camiones cisternas transportadoras de gasolina, todos pertenecientes a la empresa PDVSA.
En Chacao como en Mérida y Carabobo siguen actuando los terroristas de manera impune, lo que afortunadamente no sucede en la capital del Táchira, por razones que todos conocemos, se debe a la actuación decidida de la Guardia Nacional Bolivariana y la Policía Nacional, que después de despejar la ciudad de barricadas y lograr el retiro de los violentos, permanecen en sitios estratégicos, pero que cuando decidan retirarse, es algo que nadie duda, de inmediato la terrible situación vivida va a reeditarse incluso con más fuerza, tanto que hay sitios en los cuales han acumulado sacos plásticos llenos de arena, qeu nadie duda tiene preparados, si es que se les permite volver por sus fueros de continuar con el trerrorismo que aqui vivimos y que tanto afectó a la sociedad de esta capital con saldos muy negativos.-
Hay fuertes rumores que circulan de boca en boca, así como circulaban antes de la quema del autobús de la Normal Valecillos y de la quema de la UNEFA, lo cual sucedió junto a numerosas quemas de otras instalaciones oficiales y ya es historia; esos rumores prevén que para después de semana santa lo que vendrá será terrible y hablan que, de manera simultánea, van a atacar para incendiar, los transportes de gasolina de Pdvsa y las estaciones de servicio, como una medida desesperada, con la que piensan puedan lograr sus objetivos de renuncia del gobernador Vielma y del Presidente Maduro.( Le comenté esto a un vecino que administra una Estación de Servicio y me respondió que él no temía porque las gandolas que lo surtían no eran de Pdvsa) para ello van a utilizar lo que ya no es un secreto, en mayor número que hasta ahora lo han hecho, a paramilitares, muchos de los cuales ya han ingresado al Táchira y otros esperan la oportunidad para ingresar y cometer los actos de terrorismo en los que son especialistas, mientras que quienes de manera hipócrita se sientan en la mesa de diálogo con el gobierno, siguen llamando “estudiantes”, a los terroristas y buscan indiscriminadamente, de nuevo, imponer la impunidad de quienes están presos con el respaldo de pruebas contundentes que les incriminan , y como en el caso de Julio Borges siguen llamando a mantener “caliente” la calle, sin pronunciarse contra la violencia, igual que lo hace la mayoría de quienes fungen como representantes de la derecha en la mesa de dialogo.
Es de suponer que la alta inteligencia oficial está manejando cualquier hipótesis, incluso esta a la que me refiero en este artículo, y se tomen la previsiones que sean necesarias, sin escatimar ninguna, para no darle oportunidad a la derecha criminal que cumpla sus planes macabros, que no son en realidad el pretexto de la llamada “salida”, con la sola participación endógena, si no búsqueda de que aquí vivamos lo de otros países y que ahora mismo vive Siria.
Ahora bien qué ganamos con dialogar, decirnos verdades y oír mentiras, si quienes por parte de la derecha asisten a la mesa de diálogo, no tienen el poder de lograr que los violentos se retiren, ninguno de ellos convocó esa violencia, aunque indirectamente al no condenarla, la apoyan, y quienes podrían frenarla no lo van a hacer por el temor de que nadie les pare y entonces su liderazgo va a quedar “colgado de la brocha”, simple y llanamente porque los violentos, con muy pocas excepciones, son mercenarios bien pagados que cobran cantidades fijas cada semana pero que además reciben muy buenos bonos por cada acción terrorista que cometen.
El financiamiento, por parte de algunos, ha sido denunciado pero hay muchos financistas que cada día aportan, unos para que no les toquen sus propiedades y otros porque piensan que por esa vía van a lograr la caída del rrrrégimennn, habría que pasar a la etapa de detectar esos financistas “espontáneos”, y buscar la manera de desactivarlos.
La situación es compleja y solamente se puede resolver con la aplicación de la fuerza de manera progresiva como se hizo aquí en San Cristóbal, sin dejar de mantener a raya a los violentos, con inteligencia por un lado y con la presencia permanente de los organismos que tienen el deber de evitar la violencia terrorista, a la que nos han tenido sometidos.
