Por qué por allá si, y aquí no?, especialmente para el Ministro Dante Rivas
La verdad que cuando vemos por la tele y leemos en los medios, los resultados de las inspecciones que los fiscales de la Superintendencia de Costos y Precios Justos hace, sentimos encontradas emociones, por un lado satisfacción, por ver que al menos en algunas ciudades del país como Caracas, Zulia, Valencia, se está haciendo justicia con la aplicación de la ley, pero por otro lado envidia y hasta rabia al comprobar que aquí en el Táchira, donde por ser frontera la situación es más aguda en virtud de que casi todo se lo llevan para Cúcuta y otras ciudades de Colombia, al precio que sea porque para ellos aquí nada es caro, lo que hace que los abusadores especuladores piensen que todos los clientes que llegan a sus comercios son colombianos y han subido los precios en base a ese supuesto.
Unos de los rubros de primerísima necesidad son los relacionados con el transporte publico y privado, aunque el publico parece que ve la luz con las llamadas proveedurías, pero los particulares simplemente quedamos mamando, como se dice vulgarmente, porque nos vemos sometidos a esa ley perversa del mercado que es impuesta por los precios para la clientela colombiana.
Los casos más emblemáticos son los cauchos, las baterías, los repuestos y los lubricantes.
Cuando escribo este articulo estoy sintonizando VTV, y veo cómo en una empresa de nombre “Cauchos y Lubricantes Venezuela CA, creo que de Margarita, se comprobaba en directo la usura de sus dueños cuando vendían al publico un caucho ring 13 a 3 mil cuando el precio justo es de 1.435; el ring 14 cuyo precio justo es de 1900.oo lo vendían por encima de los 3500,oo-
Imagínense entonces lo que sufrimos los tachirenses asediados por delincuentes del mercado, a quienes no solo les importan las ganancias exorbitantes, sino por esa vía hacerle daño a la imagen del gobierno, pues aquí ha ganado espacio la conseja de que todo es culpa del gobierno, especialmente del gobernador para quien ya se habla de hacerle un referéndum revocatorio.
La verdad es que llega el momento en que la gente, me sucede a mi, se desencanta de la falta de autoridad por ineficiencia o por conchupancia, aunque ello no se óbice para dejar de creer en la Revolución y más en el legado del Gigante.
Es porque he podido comprobar personalmente que las denuncias aquí, como que no sirven para nada, he denunciado a los números existentes 0800 los sobreprecios en los cauchos, en las baterías y en los repuestos y no ha habido respuesta la especulación y la usura sigue igual.
Uno se pregunta por qué así como la Sundee, ha publicado precios en otros rubros no lo hace también en el área automotriz para que simplemente lo que hicieron en ese comercio de la Isla, se replique en una resolución que rija para todo el país y así tengamos los consumidores de qué agarrarnos cuando necesitemos adquirir algún producto relacionado.
Ahora bien aquí el problema es de doble arista, porque los comerciantes, a sabiendas de que se las ganancias al vender para Colombia son inalcanzables para quienes aquí vivimos ya forman parte de mafias que reservan los productos para que se los lleven y es así como los cauchos se los llevan rodando, los desmontan allá y regresan con lisos y vuelve y juega, igual con las baterías.
Eso lo saben el gobernador, los saben los órganos de control pero no sucede nada.
Mientras seguimos a merced de quienes encima de ser violadores expresos de la Ley, son enemigos declarados de la Revolución y son los que financiaron el terrorismo que aquí vivimos en los últimos meses.
Cuando designaron a Dante Rivas, como una especie de protector del Táchira a mí por lo menos me alegró sobremanera, porque sé de su capacidad gerencial, su dedicación, responsabilidad y eficiencia que pude comprobar cuando resolvió efectivamente un problema recién designado como Director del SAIME, sigo creyendo en él y espero haga algo para frenar abuso que aquí estamos soportando los tachirenses por parte de inescrupulosos y así evitar que coja fuerza la especie de que este es un Estado olvidado y marginado por la Revolución donde todos loa males se han juntado para hacernos la vid un ovillo.-