Somos periodistas porque creemos en el trato justo

Somos periodistas porque quienes nos dedicamos a esta profesión creemos en la gente y porque nos identificamos con el trato justo y respetuoso que merecen las personas. Quienes nos desenvolvemos en esta estupenda profesión, lo hacemos gustosamente porque las líneas que escribimos siempre llevan un mensaje orientador a la sociedad, salvo circunstancias muy difíciles en las que las palabras escritas van impregnadas de dolor.

Ser periodista no es ser artista, por mas que a algunos colegas les corresponda estar frente a las cámaras, reseñando un evento cualquiera o desarrollando una entrevista para el medio donde trabaja.

Ser periodista ?y uno tiene que tenerlo muy claro- significa ser ese necesario e indispensable intermediario entre los miembro de una sociedad y los gobiernos que cada cierto tiempo representan a la voluntad popular, solo que en algunos tiempos han habido grupos elitescos y personajes que se han creído dueños de las sociedades y se aferran a las ideas de que están uncidos por la divina providencia y con ese tenor se cree que pueden y deben manjar a los demás.

Y ese es el eterno problema al que suelen enfrentarse los periodistas. Precisamente en el Día Nuestro, 27 de junio, apreciamos de nuevo las imágenes de aquella situación vivida por el colega Luis Guillermo García, en la que el fallecido presidente Jaime Lusinchi lo increpaba de manera soez.

Nada nuevo, si se quiere fue una amenaza por lo menos visible, porque en otras ocasiones no se expresa de esa manera, sino con persecuciones y desapariciones, muy características de las décadas pasadas en Venezuela.

 El periodismo nada tiene que ver con el chisme ni la mentira. Se trata de una herramienta que permite llevar el conocimiento de unas realidades a una sociedad que presuntamente las desconoce, porque cuando por otro lado lleva una información orientadora, lo que hace es educar a la ciudadanía.

Recuerdo muy bien -pues hablábamos casi todos los días- lo que decía Arístides Bastidas cuando había conversado con algún investigador para alguna de sus entrevistas:

Nosotros estamos obligados a traducir lo que nos dicen los científicos, para poder llevar ese conocimiento que tienen a los lectores. Si yo no entiendo lo que me dicen, menos lo entenderá el lector, por eso debemos insistir con ellos en que nos expliquen bien las cosas.

Y a lo que se refería Bastidas en el fondo es algo con lo cual estamos luchando hoy día, es decir, hablaba de la verdad, que es el hilo espiritual del periodismo: no podemos escribir ni mentiras ni sandeces, porque nuestro trabajo está directamente vinculado con las personas y los periodistas no tenemos licencia para jugar con los ciudadanos, para mentirles adrede, para abusar de su humanidad y es así como debe ser entendido el periodismo de hoy.

¡La verdad siempre será la verdad, aunque intenten manipularla!

Lee el siguiente blog: wwwpertinentes.blogspot.com (Premio Aníbal Nazoa/2010) Mención Opinión)

 



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Pedro Estacio


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