Es necesario hacer revolución del conocimiento en el país y no ser un movimiento socialista de regalos, quizás correspondió a una etapa de nuestra historia que feneció con el Comandante Chávez Frías, único instrumento conocedor de estas realidades del curso del tiempo latinoamericano.

Más allá de nuestra cultura antigua e indígena, debemos criticar el consumismo que nos ahoga de una manera planetaria y local, mientras que en ésa jugada, los Estados Unidos de Norteamérica plaga el mundo de virus a Occidente y Tierra Santa, utilizando hasta mosquitos para su atrevimiento genocida, siendo las transnacionales como La Nestlé, un artilugio para sus operaciones junto a Monsanto con sus plaguicidas y germicidas,, en encuestas brasileñas y venezolanas, hemos visto como estas plagas arremeten contra nuestros niños enfermándolos y dañando su cerebro para aniquilarlos de una manera rápida, solo la medicina cubana, que, tiene un segmento sanitario   a nivel tropical, es capaz de aislar estos fenómenos  endémicos.

La colonización del pensamiento empezó desde México y los objetivos en éste instante es Brasil, Argentina y Venezuela, por la gran cantidad de minerales que contiene su subsuelo.  Los españoles fueron bien conocidos por los Galos, Romanos, Bretones y Griegos, la vieja Europa con una tradición cultural fue el objetivo de un cultivo histórico milenario, donde las goletas de piratas atravesaron los mares para  atracar en costas venezolanas, vía Dominicana y Haití, para apoderarse de nuestra cultura indígena y tomar nuestras mujeres para embarazarlas y fomentar una nueva generación de personas delictuosas, que, hoy sembraron nuestra patria de la traición republicana por un puñado de dólares.

El venezolano, ahora con otras mentalidades y genéticamente viciado en los genes, está llamado a la traición y, el presidente Maduro no pudo visualizar este caos, llevado por el populismo, cuando su tarea era rectificar y asumir con autoridad la organización de los ejes territoriales. Se complació mucho a la burguesía, donde nuestras listas a diputados se constituyó en una planetaria pública,  personas que no sabían hablar y dedicados a otros menesteres, menos a la política, algunos con fracasos en el pasado como Miguel Flores en el Municipio Rafael Urdaneta, quién en dos oportunidades fracaso en este Municipio clave en Carabobo y donde la población lo rechazaba rotundamente en todos los caseríos, urbe y barriadas populares de éste importante sector territorial, se gana es con números, no con planfetarios.

El ataque norteamericano hacia América Latina es brutal, desde los virus, enrarecimiento del clima por ondas magnéticas que dañan incluso nuestras comunicaciones, hasta el boca a boca.

Vamos a un reencuentro con el mundo precolombino, necesitamos reconstruir el  viejo humanismo y observar la condición humana de nuestros participantes, es la escolástica latina. Los humanistas del Siglo XVIII prestaron mucha atención a la situación de los pueblos originarios y en cierta forma, revalidaron la vieja polémica sobre la condición humana de los mismos.

Ahora, hay una ruptura en Venezuela porque nuestra estructura política de nivel socialista auspició campañas a favor del extranjero, se les dio viviendas, carros y se les permite cachaquear dañando la idiosincrasia de nuestros pueblos originarios que era trabajador y existen comunas bajo éste reflejo tradicional a nivel cultural.

Estamos frente  una guerra del pensamiento ideológico para pasar a las armas, solo el presidente Nicolás Maduro tiene en sus manos la clave de activación de éstos hechos por venir, por otro lado, estas elecciones fue un fraude en algunos sectores de gran aglomeración de votantes, hubo problemas con las máquinas, de allí la cantidad de votos nulos o desviados, personalmente tuve una experiencia desagradable en votar y solo mis conocimientos en computación técnica lograron quebrar  la programación y logre salvar mi voto del nulo, haciéndolo efectivo, los rojitos como Caballos de Troya se apostaron a la jugada, porque desconocen de ideología y cualquier viento se los lleva al barranco y en las barriadas populares, ciudadelas y urbanizaciones rurales, el equipo ministerial no hizo el trabajo efectivo, jamás atendieron a éstas comunidades a pesar de los recursos dados desde la presidencia de la república, la corrupción e inestabilidad política hicieron el resto.

América, es una base de discusión histórica, Cristina hizo el trabajo junto a Evo, quebraron la línea inglesa con un Sionismo en sus raíces, Brasil, Uruguay y Paraguay tienen compromisos y convenios con los norteamericanos y están allí, pero no están en realidad política, y Chile, después de Allende, siempre ha sido fascista desde sus principios, la presencia de Fidel en Santiago no les sirvió de nada.

Al presidente Nicolás Maduro, solo le queda un solo camino o ruta, atacar la especulación, ir a un ajuste bancario único con una leve devaluación, quizás la doce -12- de estos quinces años de revolución y mandar a prisión a través de la ley de quienes destruyen al Estado como tal, desde bodegueros hasta jefe de obras, nadie, debe ser dado por inocente sí abusa de la esencia bolivariana y debe ser dado como traidor a Bolívar.

Olvidémonos del cambio climático y guerra económica.  Son los hombres y mujeres de Venezuela que estamos destruyendo el país de una manera acelerada, basta que una persona se lleve un producto, jamás dos, recordemos que son unidades unifamiliar, sí se llevan dos, en un grupo hay tres o cuatro con lazos consanguíneos y se llevarían a sus hogares, doce productos del mismo renglón alimenticio. Al obrero se le paga semanal y su compra debe ser semanal, no diaria.

La revolución, sea demócrata o de izquierda es de principio socialista. Solamente necesitamos de la creación del pueblo para progresar y alejarlos del proceso delictivo  y corrupto de la ganancia fácil, Los carros y viviendas deben pagarlas y eso de las pensiones, sí es por amor mayor revisar los casos y no violentar la Ley del IVSS. Esto, es lo que nos ha  pasado, hay un quebrantamiento de la ley en todos los sentidos. Todo debe ser cancelado, en una proporción territorial a la planificación del Estado.