Definitivamente acosado por la derecha y por la izquierda el Presidente de la República Bolivariana de Venezuela sigue en pie, no da su brazo a torcer como pensaba Obama, ni con Almagro ni EE.UU, Canadá, ni Costa Rica ni ninguna otra fuerza política regional han depuesto al jefe electo por el pueblo venezolano, tampoco con las presiones de la Unión Europea, de Rajoy de España han logrado la renuncia de Maduro solicitada también por sectores de izquierda apátrida venezolana. Las razones más recientemente de acuerdo con Ricardo Vargas lo "explica la desfachatez del títere y malinche de Almagro. No han tenido ningún tipo rubor para violar todas las normas legales y de buenas costumbres. Y también explica la desbocada actuación de la oposición venezolana caracterizada por ese incontrolado y alocado antojo por terminar por cualquier vía con el gobierno del presidente Maduro" de modo irracional, a despecho de la Constitución, del ordenamiento legal del país.
Pero el factor principal por el cual Nicolás Maduro sigue en la presidencia se atribuye al Legado político de Chávez, a su pueblo, es decir "…muy a pesar de esta despiadada ofensiva económica, que está ejecutando la oposición contra el pueblo de Venezuela para tumbar a Maduro, existe un pueblo chavista con un muy elevado nivel de conciencia revolucionaria. Esta es la verdadera fuerza que ha impedido la caída del gobierno de Nicolás Maduro" (2) termina sentenciando el camarada Vargas. Sin embargo; éste agrega que; "No obstante, a pesar de la terrible y gris gestión del presidente, que genera la falsa ilusión de que será fácil tumbarlo, en el fondo, como base, está la verdadera verdad. Ha resultado ser un hueso duro de roer" (3).
Volvemos al tema de la evaluación de "la gestión de Maduro", que se hace de una manera prejuiciada, con saña política e intereses ocultos desde el campo de la izquierda del "chavismo crítico", se habla de una terrible y gestión gris del presidente" pero no se le evalúa ponderadamente, sin apasionamiento político, tan solo se reduce a condenar el desfalco de la nación de las divisas, a negarse a pagar los compromisos de la deuda, dando pie a una intervención mediante el default, a menoscabar la imagen de Venezuela, a declarase insolvente y perjudicar la posición internacional de Venezuela, en la misma onda de la oposición de derecha que buscar perjudicar el país, aislarlo internacionalmente.
Nos preguntamos ¿Cuál es esa terrible gestión gris? Veamos; el camarada Vargas reconoce "El inclemente ataque al que ha sido sometido el gobierno de Nicolás Maduro no busca sino aprovecharse de la propia coyuntura que implica un gobernante estructuralmente débil, para destruir toda la potencialidad que tiene el proyecto de revolución chavista" (4), con ello nos está indicando que los ataques políticos y económicos no se pueden obviar, quiere decir la guerra declarada de parte de la burguesía del país y sus representantes políticos que en un tinglado armado han arremetido contra los logros económicos y sociales de la revolución bolivariana, haciendo gris y terribles el proyecto bolivariano y chavista, en la coyuntura actual, de crisis económica y social, menoscabando los indicadores sociales, eso no es difícil de entender a luz están los resultados del saboteo económico, el menoscabo social, la regresión social. Si esto está claro, la gestión de Maduro ha sido opacada por las agresiones económicas de la burguesía nacional y extranjera, de allí el tono grisáceo con que se quiere mancillar la revolución.
Para el camarada Vargas hay una "despiadada ofensiva" económica, política, diplomática externa e interna, sin embargo nos dice que Maduro "ha resultado un hueso duro de roer", con esto se puede derivar que bajo ninguna circunstancia por ahora pese a la guerra económica y mediática podrá en ningún modo, el imperio ni la Mud derrocar a Maduro, lo cual quiere decir que tomando en cuenta los factores arriba señalados "El inmaduro de Maduro" como lo llama Vargas no es ningún ni inmaduro ni tampoco ha implicado, "un gobernante estructuralmente débil", ha sabido defenderse frente a las agresiones enemigas, de los despiadados ataques, ha sabido librar las mil batallas contra las fuerzas imperialistas, lo cual demuestra "la falsa ilusión" de los apátridas de tumbar a Maduro, él no está solo, tiene pueblo, tiene patria y la fuerza social del chavismo lo apoya por su elevada conciencia revolucionaria, quiere decir que Maduro brilla con el pueblo de allí que la oposición "pierda la paciencia".
La experiencia política de Chávez ha sido transferida a Maduro, él ha sorteado la guerra con Guyana, con Colombia, ha espantado los nubarrones de guerra, ahora ha derrotado al títere del imperio, Almagro dentro de la OEA misma, Maduro ha brillado internacionalmente, Venezuela se respeta, salió fortalecida de las pretensiones intervencionistas tanto de la oposición como del imperio, esto no es poca cosa, esto no es nada gris, ninguna debilidad, aunque tengamos falencias internas, la propia coyuntural petrolera, la fuga de capital, el desfalco burgués a la nación, el debilitamiento de las reservas internacionales, la agresiva política de especulación de precios, el bachaquerismo, el acaparamiento, aparte de la de las debilidades organizativas del pueblo.
Ya sabe nuestro camarada Vargas que "dentro del contexto del capitalismo no serán posibles sino relaciones humanas de naturaleza capitalista. Donde lo que predomina es el lucro individual en perjuicio del bien colectivo. Donde los otros no son sino una inmensa nada frente al ser individualista y egoísta", formado durante siglos. La conciencia del pueblo en el espíritu capitalista, resulta nada fácil cambiar su conciencia, sembrar los valores colectivos, de la cooperación y la solidaridad, aún predomina "el perjuicio colectivo", se explica aún más por la guerra del capitalismo contra el socialismo, de allí que las trabas de que surja "El hombre nuevo, realmente más humano, libre y solidario solo puede gestarse en una sociedad donde prevalezcan las relaciones de solidaridad y cooperación sobre las relaciones narcisistas, muy naturales dentro de esta sociedad, en donde existimos ajenos lo unos de los otros, afanados por la búsqueda de la ganancia a cualquier precio", es verdad, pero ese proceso no es automático, el cambio de la conciencia social.
Sin embargo; la lucha por la independencia continúa, la lucha antimperialista del presidente de Maduro sigue firme, a despecho de la alharaca de la izquierda del chavismo crítico y de los seguidores de la Mud, para estos, de acuerdo con el camarada Vargas "Es ya un lugar común escuchar por doquier que a Maduro nadie lo quiere. Creo que podría ser todo un reto para el presidente cambiar esta percepción. Lo cierto es que mientras esa fortaleza que es el pueblo verdaderamente chavista exista, a Maduro será cuesta arriba sacarlo del poder por las malas. Y si los gringos se atrevieran a invadirnos, esta fuerza crecería hasta hacerse invencible". No hay duda, se trata de luchar contra las falsas percepciones de la burguesía, del chavismo crítico, de izquierda crítica, "Maduro fracasó, un gobernante estructuralmente débil, el líder inmaduro, Maduro no es querido por nadie, Maduro petrificado", entre otros calificativos, "Empero, si Nicolás Maduro persiste en sus yerros podría provocar el desencanto en esa maravillosa fuerza que lo sostiene en el poder, y entonces, lo perderá todo" termina sentenciado Vargas.
¿Qué hacer?, ¿Qué propone el camarada Vargas para enderezar los supuestos yerros de Maduro para superar la crisis?. Nos recomienda que "La razón de ser de la revolución socialista es la abolición de todo el sistema de explotación capitalista. Los acontecimientos que estamos viviendo en Venezuela nos lo dicen. No es posible construir el socialismo sin destruir en un solo acto tanto el estado burgués como las propias relaciones sociales capitalistas". Fíjese el engaño, nos crea la ilusión revolucionaria de luchar por el socialismo, abolir "todo el sistema capitalista" mediante la abolición de la explotación del trabajo, como si bastase expropiar las empresas y transferirla a los trabajadores y de inmediato acabamos con el capitalismo, surge la consciencia de clase de inmediato, el pueblo sabe lo que tiene que hacer y todo el andamiaje ideológico del sistema capitalista se viene abajo por si solo.
En verdad el camarada Vargas es un iluso, un chavista crítico iluso, pretender que con expropiar las empresas capitalistas se hace la luz del socialismo de inmediato, pero esto no es todo, sigamos analizando los yerros de Vargas, nos sugiere "destruir en un solo acto tanto el Estado burgués como las propias relaciones sociales capitalistas", vaya como si el socialismo surgiera de un plumazo, por obra voluntarista y mágica del liderazgo, y no ven la obra de la educación ideológica del pueblo, el papel del partido, el liderazgo de las organizaciones obreras, simplemente un golpe milagroso, en un acto mágico, milagroso tomar una decisión de Estado, abolir de golpe el Estado burgués y la base económica del capitalismo. ¡Vaya ingenuidad revolucionaria!, como si la revolución no fuese una lucha histórica sino coyuntural.
Estamos consciente de que la construcción del socialismo en la etapa de transición es un proceso largo, en que "No puede haber una verdadera revolución si se deja intacto todo lo putrefacto que hay en las relaciones de explotación y opresión de la sociedad burguesa" Asimismo, "Se convierten en contraproducentes las predicas sobre el socialismo si en la práctica se preservan las viejas y obsoletas relaciones de producción capitalista", debemos cambiar la economía, hacer una revolución económica, para ello es necesario formar no solo técnicamente a la clase trabajadora, sino también formarla para la dirección de las empresas públicas, hacerla responsable del formidable reto que tiene, la gestión de las empresas del pueblo, la gerencia de la base económica y del Estado, pero hace falta conciencia ideológica sobre su papel de abolir la explotación todo el sistema de explotación capitalista.
Por eso, frente al argumento de que "Ahora mismo, en Venezuela están dadas las condiciones históricas para traspasarles a la clase trabajadora los grandes medios de producción y distribución en manos de la clase capitalista. No hacerlo implicará abortar un proceso revolucionario que tiene impulso para llegar lejos. Este gobierno no puede seguir subestimando la potencialidad que tiene la clase trabajadora venezolana para asumir la dirección de esta sociedad. Ya basta de hipocresías sobre este particular. Las empresas en manos del estado y por cierto, mal dirigidas por gerentes extraídos del campo militar, deben pasar inmediatamente a manos de la clase trabajadora, para que en la práctica, se curta en estos exigentes y necesarios menesteres".
No olvidemos lo que ha pasado en las empresas expropiadas, las cooperativas apoyadas por el gobierno, la tragedia colectiva de los núcleos de desarrollo endógenos, las frustraciones en los fundos zamoranos, la decepciones en las empresas públicas del Estado, todo por falta de formación ideológica, por la ausencia de firmeza revolucionaria de la clase obrera, por el influjo de la ideología capitalista, aquí, todavía, "donde existimos ajenos los unos de los otros, afanados por la búsqueda de la ganancia a cualquier precio" ha faltado a la ética socialista, y sin embargo nuestro camarada propone a despecho de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, cambiar en un solo el capitalismo, cambiarlo en un solo acto todo el sistema capitalista sin medir el grado de conciencia social. Pongamos un ejemplo.
En Venezuela se encuentran instaladas 27 plantas para la producción de harina precocida de maíz, de las cuales 18 son operadas por el gobierno de Nicolás Maduro y 9 por el sector privado. De las plantas privadas, 3 pertenecen a Alimentos Polar (harina PAN), 1 a Alimentos La Lucha C.A (Lucharepa), 1 a Asoportuguesa (Doña Emilia), 1 a Cayca Alimentos (harina Casa) y 2 al grupo mexicano Gruma: Molinos Nacionales (Monaca) y Demaseca productores de Harina Juana y Demasa, en proceso de expropiación y con "administradores especiales" nombrados por el gobierno desde 2013. Polar con tres plantas, tiene el 50% de la capacidad de producción. El resto las plantas están operadas por funcionarios del gobierno, incluyendo las que pertenecieron al Grupo Pro, expropiadas en el año 2009, que son Maizera Proarepa (Ricamasa) y Pronutrico (Doña Rosa)" y se pregunta el pueblo, ¿Dónde está la productividad de esas empresas, de la clase obrera, de sas plantas del gobierno y el pueblo, donde está la producción de harina de maíz para saciar el hambre del pueblo?
Finalmente, lo anterior no niega que como dice el camarada Vargas que "El socialismo solo puede ser realmente edificado por los trabajadores, explotados y oprimidos por el capital….Este gobierno no puede seguir subestimando la potencialidad que tiene la clase trabajadora venezolana para asumir la dirección de esta sociedad. Ya basta de hipocresías sobre este particular. Las empresas en manos del estado y por cierto, mal dirigidas por gerentes extraídos del campo militar, deben pasar inmediatamente a manos de la clase trabajadora, para que en la práctica, se curta en estos exigentes y necesarios menesteres". Sabemos que la obra del socialismo es obra de la clase trabajadora, pero para eso, hay que prepararla para asumir la dirección de las empresas públicas, mixtas, populares. Ella debe aprender a gerenciarlas con criterios socialistas, con eficacia y ética, no importa si son civiles o militares, la unión cívico militar también colocan a los militares el reto de ubicarse al lado de los trabajadores, ellos también son parte de la revolución bolivariana, también son trabajadores al servicio del Estado revolucionario, de la revolución bolivariana, son parte de la defensa en unión cívico-militar y con esta unión, Maduro lo defenderá todo, la Patria socialista.
Fuente consultada:
1.-Vargas, Ricardo "Nicolás Maduro… lo perderá todo", aporrea, 04/06/2016
2.- La Patilla, "El monumental fracaso de las 18 plantas del gobierno que apenas producen harina de maíz", junio 4, 2016.
