Aunque el inicio de este articulo habla de pronóstico más que eso puede ser un hecho. Una persona con algo de capacidad para analizar los aconteceres diarios de la política nacional e internacional llega a la conclusión que eso puede ocurrir, pero basado en un análisis no porque tengamos una bola de cristal o algo parecido, somos analistas no brujos.
Luego de la derrota aplastante en las parlamentarias del 6 de diciembre. El gobierno entendió que la realidad ya era otra, los tiempos de gloria del comandante Chávez habían llegado a su fin, de manera que decidió emplear otros métodos nada democráticos, por cierto, fue el blindarse controlando unos de los poderes públicos, el tribunal supremo de justicia.
Ya altos personeros del gobierno han dado señales preocupantes sobre el tema de las elecciones, Pedro Carreño manifestó en una entrevista que no habrá elecciones mientras estemos en esta situación económica, como si una cosa estuviese peleada con la otra, hasta el mismo Presidente Nicolás Maduro expresó en una ocasión que no iban a calarse otra elección que ellos fuesen a perder, y que eso no es prioridad para el en estos momentos, muy bien.
La última gota que derramo el vaso fue la abrupta anulación de la recolección de firmas para un referendo revocatorio, el gobierno hizo hasta lo imposible para impedir una eventual consulta hasta que lo logró, sin guardar las formas utilizó de manera grosera el TSJ para prohibirlas, los que nos llevó a una crisis aún más profunda, así que solo están escurriendo el bulto huyéndole a la democracia, pero también saben que no pueden hacerlo todo el tiempo, el año que viene les toca medirse y por las evidencias aquí expuestas creo que recurrirán a los caminos verdes de nuevo para que no se realicen, BUENO AMANECERÁ Y VEREMOS.
