Como todos sabemos, la crisis política y la violencia se acrecentó cuando Nicolás Maduro, haciendo uso de sus facultades como presidente de la República, electo democráticamente convoca al Poder Originario para realizar una Constituyente, está convocatoria no la hace él abruptamente, lo hace apegándose a la Constitución venezolana que señala:
Artículo 348 La iniciativa de convocatoria a la Asamblea Nacional Constituyente podrán tomarla el Presidente o Presidenta de la República en Consejo de Ministros; la Asamblea Nacional, mediante acuerdo de las dos terceras partes de sus integrantes; los Concejos Municipales en cabildo, mediante el voto de las dos terceras partes de los mismos; o el quince por ciento de los electores inscritos y electoras inscritas en el Registro Civil y Electoral.
A partir de ese momento los demonios se desataron en el país, la oposición que meses atrás estaba enamorada de la opción, a constituyente tal como lo demuestran declaraciones hechas por estos líderes, no uno, sino varios, se mostraron totalmente en contra de la solicitud hecha por el presidente. Ahora lo que no nos queda en claro es el motivo de la negativa, ellos ponen como excusa que es porque no se le consultó al pueblo primero, pero el pueblo lo tomó de buen agrado de no ser así no hubiesen presentado sus aspiraciones a precandidatos cincuenta y dos mil aspirantes, no fueron obligados ni impuestos a dedo. Se enfrascan en un discurso caza bobos para hacernos creer que ellos lo harían diferente. Ellos que al día de hoy están queriendo montar un gobierno paralelo, amparándose en una consulta interna, llena de ilícitos, sin respetar las reglas electorales, poniendo a firmar hasta el gato, y con todo y eso, todavía tienen que alterar las cifras para que les puedan dar los números, ya que sus propios seguidores lo que quieren es vivir en paz.
No es difícil imaginar la constituyente propuesta por los señores de la MUD; un grupo de juristas entre los que estarán Julio Borges, y Capriles Radonski como célebres abogados de la República, y otros amigos más de la cúpula opositora, a puertas cerradas, escribiendo la nueva Constitución a su imagen, semejanza, propósitos y necesidades, por supuesto con la benevolencia de los dinosaurios de la política cuarto republicana que continúan haciendo vida en la MUD, y que son expertos en voltear la Constitución a su favor, después la llevaran a elección y nosotros como soberano (tontos) diremos sí, a una nueva Constitución que se volteará contra nosotros después. Es un caso hipotético pero que identifica a los señores de oposición tal cual son. ¿El pueblo de a pie conocía algo sobre la Constitución del 61? No, éramos completamente ignorantes de cual eran nuestros derechos, pero los deberes si teníamos que cumplirlos y los principales eran no abrir la boca, no quejarse, no opinar y menos en política, porque si pensabas diferente eras perseguido ¿Derechos Humanos? ¿Cuáles?
En esta etapa de la historia política de Venezuela, es la primera vez que el pueblo tiene la oportunidad de hacer ley sus propuestas, de decidir cómo quieren que funcionen las leyes de esta nación, de ser partícipes directos del destino de nuestro país, Nunca como hoy el pueblo venezolano había tenido tanta responsabilidad en sus manos, Chávez siempre lo dijo que el poder era para el pueblo, y hoy ha llegado el momento de demostrarlo, y sabemos que vamos a salir airosos de esta prueba crucial que la revolución pone en nuestras manos. Por eso ese simulacro superó cualquier expectativa, por eso el júbilo de los que allí estaban, con esa actitud y compromiso le dijeron a quienes dudaban SI, QUEREMOS CONSTITUYENTE. Que reconocemos a los que no la quieren, si, los reconocemos y se lo respetamos, pero no por eso van a aplastar nuestro derecho, ¿Cuándo se había tomado en cuenta el poder originario? Nunca! Y menos para redactar, proponer o discutir leyes, en la IV República al soberano no se le consultaba, se le exigía o compraban conciencias para que los pusiera en el poder, hoy en la V, los mismos personajes usan a una parte del soberano para que les sirvan como escudos humanos, mientras ellos salen del país a vender la patria.
Tal vez por eso la molestia tan grande, porque ellos jamás han visto al pueblo como algo más que un simple voto, por eso ignoran a la otra parte de la población que los adversa, en esta Constituyente convocada por el presidente no habrá colores políticos, ni habrá condición social, habrá algo muy importante que este país está necesitando con urgencia y es DIALOGO, ya lo había dicho antes, no sólo los políticos tienen derecho a dialogar y a dirimir los problemas del país, nosotros como pueblo somos los más perjudicados en medio de esta guerra de poderes, y esta es la ocasión para expresar lo que verdaderamente queremos que se haga con Venezuela, porque los políticos cambian, ya vendrán otros con nuevas propuestas para tratar de convencernos, pero nosotros como pueblo seguimos estando aquí. Y bien nos merecemos el derecho de decidir cómo queremos vivir, sin que nadie nos lo imponga y venga a decidir por nosotros.