Mi favorito de todos los tiempos, el padre del neoplasticismo Piet Mondrian, usó en su descomposición progresiva de la imagen las líneas rectas, algunos incluso dicen que su rigurosidad fue tal que doblaba la equina sin hacer curvas, de la misma forma que lo expresaba en la plástica, convirtiéndose entonces en otro excéntrico personaje más dentro del mundo del arte.
Las líneas rectas le sirvieron a Mondrian como vaso comunicante efectivo para su obra, sin embargo, para nosotros las estrictas líneas rectas no siempre serán la solución para la comunicación efectiva.
Nuestra perspectiva comunicacional como pueblo chavista esta afectada en la bidireccionalidad que debe conservar cualquier ejercicio de la comunicación, uno habla mientras el otro escucha para poder responder y generar una conversación.
Seguramente muchas veces tendremos más disposición de hablar que de escuchar, sin embargo, para que sea efectiva la comunicación debemos suavizar esas líneas rectas e incluir algunas curvas, oblicuas, paralelas, etc.
De esta manera, podríamos presentar un plan según las necesidades del pueblo que seria desarrollado de forma inmediata generando un ciclo perfecto desde el escuchar (para) planificar (para) ejecutar (para) responder, actuando de forma eficaz sobre las necesidades reales planteadas cotidianamente.
Cuando queremos convertirlo todo en "estratégico" y desaparecen las necesarias explicaciones del porqué se anuncia algo que se terminara ejecutando luego en tres o cuatro meses, cuando las necesidades variaron y se convirtieron en otras, nos convertimos en ese Mondrian doblando la esquina en estricta línea recta, brillante y genio aunque excéntrico y abstracto.
No es precisamente ahora que podemos abstraernos de lo que son las necesidades concretas de un pueblo que confía una y otra vez en lo que la revolución puede hacer para transformar sus vidas, no es este el tiempo de exigir sin antes dar
de forma concreta y clara las respuestas que está buscando ese pueblo.
Escuchemos, interpretemos, planifiquemos y ejecutemos en función de los tiempos de una respuesta real, solo así tendremos éxito e impacto desde adentro del corazón del pueblo hasta sus luchas, tenemos la posibilidad de vencer, solo si lo hacemos juntos.