Seguimos advirtiendo de las enseñanzas del "Manifiesto de Cartagena", valioso documento del Libertador fechado en diciembre 12, de 1812 en Cartagena de India, reviste gran importancia para la revolución bolivariana, ahora sobre todo en que la oposición resultó vencedora de los comicios electorales a la gobernación de los estados, Zulia, Táchira y Mérida, teniendo en cuenta que dichos gobernadores electos se mantienen en posturas de insubordinación, desconocen al Poder Constituyente, las institucionalidad democrática, el estado de derecho y sobre todo, al poder ejecutivo, a Nicolás Maduro, siendo así, esto prepara terreno para la estrategia porvenir coordinado con el Grupo de Lima, el secesionismo de dichos estados, amenazar la integridad territorial, considerando además el apoyo internacional de los Estados Unidos que mantienen posiciones hostiles contra la democracia bolivariana, participativa y protagónica, contra el pueblo que le ha dado la espalda en las elecciones.
Ante estas eventualidades no podemos sino rescatar las lecciones de Manifiesto de Cartagena, recordemos "la ciudad subalterna de Coro que se negó a reconocer la legitimidad", y mantuvo una actitud hostil, como hizo lo necesario para la caída de la Primera República, cómo la inocencia política de la Junta Patriótica dejó dejar hacer y dejar pasar aquel gobierno insubordinado a la confederación, negándose a someter por la fuerza, de cómo "la subdivisiones de la provincia de Caracas, despertó rivalidades en las ciudades y lugares subalternos, contra la capital, como estos sirviéndose de la propaganda de que Caracas era la "Tirana de las ciudades" y la sanguijuela del Estado", todo esto encendió el fuego civil dice Bolívar, el discurso de la descentralización.
Hoy con el triunfo de la oposición en lo que se llama "los Estados de la Media luna", la política de Colombia como parte del Grupo de Lima, se sirve de la misma para realizar sus intereses oscuros, los de la oligarquía colombiana, de utilizar el Zulia como plataforma para el transporte de mercancía naviera, asi mismo la apropiación de sus recursos económicos en la que el petróleo juega importante valor estratégico, de allí el interés de los Estados Unidos y Colombia en la región, de establecer relaciones estratégicas con "los gobernadores opositores" al poder central, al poder Estado-Nación amparados en un discurso descentralizador, secesionista y globalista.
Tenemos que estar OJO AVISOR ante el discurso y las acciones opositoras en los estados fronterizos, el paso de fuerzas infiltradas, de mercenarios capaces de crear en Venezuela otra Siria. "La Siria Suramericana", esperando al país la martirización, devastaciones, angustias, terror, escasez y muertes, ejerciendo ellos la tiranía, valiéndose de la idea de que por el hecho de ganar las elecciones, de que el soberano les dio la confianza, le delegó la responsabilidad administrativa del Estado, eso no significa que puedan desconocer el estado federal, la unión nacional, la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, e "instituir a su antojo el gobierno que le acomode" a sus intereses económicos y políticos.
Pretendiendo un gobierno neoliberal, neoglobalista, la oposición venezolana en su persecución de la ilusión de la felicidad y del progreso liberal, trata de imponer una sociedad desigual, un proyecto ya probado en la práctica, fracasado, valiéndose de que los ciudadanos aun careciendo de "virtudes políticas", no sepan defender sus derechos, cegados por la situación de crisis inducida, por suerte la revolución bolivariana ha despertado a este pueblo, lo ha llevado a pisar el terreno de la democracia participativa y protagónica, por lo que se hallan en "aptitud de ejercer por si mismo sus derechos" constitucionales, pero aún faltan virtudes políticas, ciudadanía, allí están esos resultados electorales, señalan aún nuestras debilidades, lo que el gobernador dejó de hacer, los que el Psuv dejó de realizar, hace falta el látigo de la contrarrevolución decía Chávez, para reivindicar los derechos sociales y políticos, en verdad hace falta descabezar las camarillas políticas de los Estados donde perdió la revolución bolivariana, en especial en el PSUV Zulia caracterizada por la indiferencia a las quejas de sus militancia y la corrupción.
Tenemos hoy un escenario nacional, "facciones intestinas, amenazas de guerra del exterior", y de presentarse "un gobierno débil con la contrarrevolución de la media Luna", corremos el riesgo de perder la República Bolivariana, estos buscarán la manera de descentralizar a los estados, seguirán acusando al gobierno central, de dictadura, a Nicolás Maduro de tirano, de régimen opresor, el gobierno bolivariano tendrá que sostener la revolución de lo contrario pasaría lo que la provincia indefensa de Coro infligió a la Primera República y a toda la Confederación, la caída de la revolución chavista, la caída de la Primera Revolución Socialista.
Termina Bolívar evaluando este asunto; "Es preciso que el gobierno se identifique, por decirlo asi, al carácter de las circunstancias, de los tiempos y de los hombres que lo rodean,. Si estos son prósperos, y serenos, él debe ser dulce y protector, pero si son calamitosos y , él debe mostrarse terrible, , y armarse de una firmeza igual a los peligros, sin atender a leyes ni constituciones, ínterin no se restablecen la felicidad y la paz".
Ya antes de las elecciones regionales a gobernadores vimos los peligros, cuatros meses de guarimbas, de abril a julio del presente año, escaramuzas de guerras, provocaciones de guerra civil, de acciones terroristas, peligros que violentaron los derechos constitucionales, impunidades que desestabilizan la República, una oposición "calamitosa", que arruina al país, suicida, somete al país al holocausto económico, que sin atender leyes ni constituciones desconocen al estado nación, a sus poderes públicos, a los tribunales, al ejecutivo, a la fiscalía, al contralor, hasta el poder constituyente, en estas circunstancias de sobrevenir la insubordinación de los estados opositores de la media luna, es menester que el gobierno asuma "la firmeza igual a los peligros, y mostrarse terrible" frente a esa oposición secesionista y apátrida.