La élite revolucionaria bolivariana, viene asumiendo su dominio hacia el sistema educativo, político y mediático para conformar su propia agenda pública y, promover la apatía política entre grupos de derecha, a su vez, darle una sensación de bienestar a las minoras que trazan su ruta en lo racial y pobreza. Es que, la manipulación informativa ha sido orientada a convencer a los trabajadores de que hay una plataforma de crecimiento para cada uno de ellos, pero, el punk ideológico no existe, simplemente el Psuv es un partido de corte electorero junto al otrora partido del pueblo Acción Democrática.
Maduro, junto al especialista en votación masificada, han logrado captar el voto decisivo de sus militantes, para hacerlos avanzar de una manera organizada hacia el triunfo electoral. La idea es imponerse en los Estados claves y, así se hizo. Lo importante es tener aceitado el aparato organizativo, esto, lo vemos en el psiquiatra Jorge Rodríguez, quien ha mostrado ser muy audaz, en el asunto electoral.
La violencia de la extrema derecha es calificada, como terrorismo doméstico, contando con terroristas autóctonos que, en vez de desplegarse al crecimiento ético de la sociedad, se dedicaron a dañar la moral de sus propios amigos de lucha en la calle, argumentando feas expresiones que causan malicia, pena y dolor.
Es importante recordar que los cambios en las normas sociales suelen reflejarse en los cambios de comportamiento. Por lo tanto, es razonable sospechar que los extremistas realizan un conjunto de acciones porque sienten que sus puntos de vista gozan de legitimidad y aceptación social crecientes, lo que los anima a materializar sus prejuicos.
La MUD- Psuv- AD, fragmento a sus votantes y promovió sus derechos, indicando que los éxitos obtenidos, constituyen un bloque desestructurado para lograr las inquietudes del votante. algo novedoso y, que la mayoría de nuestros líderes tienen recursos sólidos para desplegar una campaña con solo, tres meses de acción y un despliegue de esfuerzos para alcanzar el voto electoral. También merecen aguda atención los formatos estéticos y discursos desestructurados, coloridos y divertidos, que sin embargo difunden descreimientos y pesimismos en los esquemas representativos. Estos esquemas, cabe señalar, no actualizan sus despliegues operativos, estéticos y discursivos, lo que facilita la difusión mencionada. Hay una grieta entre sus comunicaciones y las nuevas demandas y expectativas ciudadanas-electorales.
Los descreimientos y pesimismos promovidos por las derechas favorecen la apatía y el abstencionismo social. Este efecto, en ejercicio circular, favorece la promoción de reformas electorales que abanderadas en las innovaciones tecnológicas y las libertades individuales, reducen y desincentivan la participación electoral, cristalizando el fenómeno que alegan combatir Las nuevas tecnologías informacionales son bien aprovechadas por los impulsores de la división social y las batallas culturales excluyentes y revanchistas. La energía de una La lucha entonces se concentra en un objetivo fijo, es decir el líder, quien se convierte en una pieza fácil para perder su representatividad real o de imagen en el momento de ser afectado no solo por señalamientos específicos, sino por la revelación de secretos o al menos de situaciones poco conocidas para la generalidad. Los seguidores obligados son los primeros en retirarse, lo cual provoca una atomización ante el enemigo común. Por ello, quien de pronto se presenta lanza en ristre a enfrentarse a este en el nombre del resto, debe estar seguro de no tener, como se dice, esqueletos en el clóset, ni relaciones con personajes por cualquier motivo impresentables. Se convierte en una especie de pararrayos donde estos caerán inmisericordemente.
Cuando en un grupo social dividido y con ideas contradictorias se descubre la necesidad de arreglar un tema causante de daños a todos, ocurre algo muy simple de explicar: la unión. Existe un enemigo común y entonces no se le debe enfrentar por separado, pues la unión hace la fuerza. Cuando la amenaza termina, la separación ocurre de nuevo. Los ejemplos históricos son numerosos. Ese enfrentamiento necesita de un líder, en el cual de alguna manera se representa esa lucha, pero encontrar este adalid es complicado, sobre todo cuando las diferencias internas son difíciles de conciliar. La aceptación de esta persona se hace a regañadientes, sobre todo cuando ese puesto, en realidad simbólico y de imagen, es el resultado de acciones aventureras.
Los partidos en Venezuela, parecen casas distritales de comadreos y los bustos de los héroes patrios, abandonados en sótanos de la proveeduría ancestral
Mucha gente no puede, por incapacidad o simple capricho, entender la magnitud del maremágnum en el cual se mete o crea. Muchas veces los errores de alguien provocan beneficios para su contrincante, aun cuando no los merezca total o parcialmente. La piedra lanzada desde la cima de la montaña hace dos meses por el presidente Nicolás, bien asesorado, se convirtió desde hace semanas en un incontrolable alud. justifica, eso sí, su fuerza del poder antes de lo previsto, pero es muy peligroso para él no darse cuenta de cómo debe actuar a partir de haber apaleado el avispero, como se dice —o decía— en Zulia. Después del encontronazo de la semana pasada, todos los pseudo y autonombrados socialistas y adecos de la Asamblea, parece ser que la pena les duró poco: esta semana nuevamente se pusieron en contra de las solicitudes de la población para abrir el proceso político a una mayor competencia y participación Será que realmente los adecos son Psuvistas