Mortalidad infantil siempre ha sido muy alto en la poblacion Warao y necesita con urgencia una intervencion.
Ya en el año 2012 entre el 30 y 45% de los niños (depende de la comunidad) murió antes de llegar a un edad de 5 años. Un excelente trabajo de Julian Villalba, medico rural en estos tiempos en el Delta. Su trabajo fue publicado. Causas de muerte; diarrea e infección respiratoria
Las muertes ocurrieron entre los días 24 y 27 de enero, en el municipio
Antonio Díaz, parroquia Manuel Renauld. Específicamente en las comunidades
de Mujabaina de Bonoina, Yarita y Kuarejoro de Guayo, y fueron el resultado
de cuadros crónicos de diarrea, vómito y deshidratación. Todos los niños
pertenecen al pueblo indígena warao, en edades comprendidas entre 1 y 3
años. En la comunidad Yarita, los niños fallecieron entre los días 26 y 27
producto de una aguda diarrea acompañada de vómitos y fiebre. El día viernes
26 de enero, murieron dos niños de una misma familia en la comunidad de
Kuarejoro. Los infantes fallecidos tenían siete meses y tres años
respectivamente.
El equipo del observatorio de derechos indígenas Kapé-Kapé se hizo presente
en las comunidades para constatar la veracidad de los hechos y recogió los
argumentos y las pruebas fotográficas.De acuerdo a los testimonios de los
padres, "son varias muertes, los niños mueren sin remedios, primero le da
diarrea con vómito y acompañado con fiebre que mata a los niños en pocos
días" señala Antonio Campero. Los ambulatorios más cercanos son las
medicaturas de Nabasanuka y San Francisco de Guayo, en las parroquias Manuel
Renauld y Padre Barral. Según testimonios de los familiares, los padres
acudieron a los ambulatorios, sin embargo le informaron que no contaban con
medicina e insumos médicos "ni siquiera con una gasa para atender a los
pacientes".
El día 28 de enero falleció sin atención médica una indígena de 65 años, en
la comunidad de Bonoina, parroquia Manuel Renauld.
En las comunidades visitadas: Manacal, Morichito, Kuarejoro, Yarita,
Jerejisbanoko, Warowaro, Cuyubini y Bonoina, los padres indígenas alertaron
sobre la presencia de tosferina entre la población warao, y que está
atacando con mayor fuerza a los niños y jóvenes. La población afectada
consume agua directa del río sin ningún tratamiento, no cuentan con redes de
excretas, ni servicios básicos. El municipio Antonio Díaz es la localidad
con mayor población indígena warao. De acuerdo al censo poblacional del
2011, cuenta con una población de 26.661 que pertenece a este pueblo. A la
luz de esta cruda realidad que están viviendo los indígenas warao,
especialmente quienes viven en las zonas más alejadas, Kapé Kapé enciende
las alarmas para que el Estado propicie las medidas necesarias para poner
fin a la mortandad y precarias condiciones de vida en las que viven estas
comunidades.
Sólo garantizando programas de salud tanto de emergencia, como preventivos y
garantizando su continuidad podrá cambiar esta realidad que hace más
evidente la brecha de inequidad entre las condiciones de salud de las poblaciones indígenas.