Los dirigentes políticos del país al igual que unos comerciantes de cierta jerarquía, solo quieren darle ruptura al Estado para entorpecer los mitos creadores de investigación jurídica, donde los paraisos perdidos se encuentran ante el desfalco monetario del país y, solo desean reivindicar sus agravios con buenas obras.
Ni los religiosos son capaces de detener estas revueltas financieras entregadas a bachaqueros y militares sin conciencia social, obviando que vivimos en tierras de libertadores. Allí, esta la historia, habla por sí sola, solo las religiosas lo creen, porque estamos dominados por ese precepto, ya lo habló Luis Beltrán Prieto Figueroa, Arturo Uslar Pietri, Cecilio Acosta y Andrés Eloy Blanco. La historia predica esa espiritualidad dada a conocer por las viejas comadronas de la época.
Esta debacle política viene arrastrándose desde 1705, cuando los ingleses chocaron con los españoles por la mano de obra esclava, proveniente de África, Haití, República Dominicana y Cuba. Así que una minoría caraqueña se planto alrededor de la entrada de Caracas y formaron sus riquezas en las haciendas que poseían.
Las consecuencias vandálicas y apocalípticas, se encuentran presentes, en un Estado deteriorado, completamente Medieval y con una sola carta insospechado, la de los cubanos que desean entrar a México y Colombia, gracias a la ambigüedad de sus presidentes, Peña Nieto y Santos. Entonces, hay que mirar el porvenir las posibilidades de que Castilla, España, nos regrese documentos históricos documentados para alejarnos de la dictadura comunista, no del marxismo dialéctico. Hay en el ambiente, una confrontación contrarrevolucionaria dañina para el gentilicio venezolano, muchos se hacen el ignorante, por dádivas en un populismo de bajo niveles.
Tenemos que quitarnos los lobos y hienas de encima, son destructores y se tornan dominantes, sabemos como creció Venezuela, el interés mostrado por pequeños empresarios, así de fácil, llegó la historia moderna, como las capas de los trabajadores trabajaban esforzadamente para sobrevivir. Así que evitemos el empacho de una dictadura controlada desde afuera y la explotación del hombre por un sistema ya establecido.
No hay que regresar al pasado. Muchos desean aprovecharse de este embrollo y violentar La Constitución Bolivariana, cuando, ella se fundamentó para beneficiar a todos. Somos una sociedad democráticamente estructural, no debemos chalanear con ella, todos, tenemos allí nuestro origen. No caben soluciones extranjeras, somos nacionalistas. Aunque". El nacionalismo no tiene cura definitiva".
Alguna solución, no obstante, habrá que buscar, más adelante y sin prisas. Ahora únicamente cabe hacer lo que hizo Mao Zedong en 1937, ante la invasión japonesa de China: impulsó el Frente Único Antijaponés, aliándose con Chiang Kai-shek, y dejó para más adelante su guerra civil contra el Kuomintang. Primero el atacante de la Nación, y luego el adversario de clase. Pues eso: ahora, en España, un frente unido constitucional, sin matices ni ocurrencias. Y, más adelante, a trabajar en soluciones serias, integrales e integradoras. En el marco de Europa y de lo europeo, claro. Ahora, Constitución.
Debemos, buscar un verdadero líder izquierdista que ame a su pueblo, que no lo utilice con su populismo y bonos, es necesario trabajar. Mientras, el movimiento opositor es fetichista y mítico.
La historia de lo que pasa actualmente en Venezuela, está escrita desde la conjuración de Maduro: Privado de sus apoyos políticos, derivó hacia el populismo más exacerbado y comenzó a reclutar un nutrido grupo de hombres de las clases desposeídas y campesinos que se vinieron a las urbes, descontentos con la política sectorial. Y prometió la condonación de deudas y regalías para ganarse a los pobres". Esto se lee en Wikipedia, la fuente global actual de divulgación de conocimientos. Y cito a Wikipedia porque sus informaciones están mínimamente contrastadas, mientras otros creen que pueden modelar la realidad vía Twitter
Julio Borges perdió sus apoyos políticos. Cosa normal, en política; y los perdió por varias razones. Entre otras, primero, porque, en tres convocatorias electorales sucesivas había conducido a PJ, cuesta abajo por el camino de la irrelevancia; segundo, porque en su ejercicio como secretario general del partido PJ, se desvió hacia una concepción caudillista, narcisista y mesiánica del cargo —"la toma de decisiones me corresponde a mí", —, al margen de su carácter de mero portavoz de una comisión ejecutiva corresponsable en la toma de decisiones, en República Dominicana.
Y, tercero, porque se puso a sí mismo por delante de PJ y de Venezuela a la hora de valorar los intereses en juego.
Nadie, tiene carrera política descifrada en Venezuela, es un militarismo soez envuelto en un mundo civil falso.
. Un grupo de personas —de notables, vaya— que han desarrollado un cursus honorum, una carrera política, pública y/o profesional gracias a las proximidades y bienquerencias de los sucesivos aparatos y, Militantes de mucho tiempo o llegados a revuelo, cooptados e integrados en puestos públicos y/o en candidaturas varias, merced a la unción del santo dedo de los que decidían. Sin tener preparación al cargo.
Afiliados o no afiliados, ninguno le puso ninguna pega a ningún aparato cuando fueron propuestos como ministros o ministras; o como secretarios/as de Estado; o como cabezas de lista y presidentes del Parlamento Europeo o venezolano; o como embajadoras ante cualquier organismo; o como diputados y senadores, incluso por provincias ajenas y lejanas; o como vocal del Consejo General del Poder Judicial y electoral o como redactores reiterados de variados programas y manifiestos; o como presidentes de autoridades portuarias, o como miembros de la ejecutiva federal. Sin preocuparse del apoyo de la militancia. La idea es darle poder a la gente, los aparatos del partido, lo hacen todo.
"Un partido de militantes y no de notables". "Vamos a devolver la voz a la militancia". No es creíble. Es Música celestial. Maduro, intenta ganarse a la plebe prometiendo la condonación de deudas y regalías. Y ahora se promete a la militancia la voz y la palabra, y darle el finiquito al aparato. ¡Pura filfa, todo!
Toda organización necesita un aparato. Desde Oxfam Intermón hasta el Partido Comunista Chino; desde Cáritas Diocesana hasta Podemos; desde la General Motors a la N’Drangheta calabresa; desde el Barça hasta una orden mendicante. Especialmente, lo saben todos aquellos de entre ellos que han participado en las estructuras dirigentes de sucesivos órganos de dirección política, o que han ocupado puestos de responsabilidad pública, o que se han integrado como responsables en instituciones y entidades, públicas y privadas. Que cada quien maneje sus contradicciones como pueda y quiera. Allí, están todos, agrupados desde hace veinte años.
Una organización democrática puede ser de funcionamiento representativo o asambleario. El primero facilita las síntesis y los acuerdos; y el segundo, la crispación y la confrontación desnuda. El modelo representativo impulsa la constitución de equipos integrados entre los dirigentes, mientras que una estructura asamblearia fomenta los caudillismos, la sumisión del entorno, el despotismo del ungido por las masas y las satrapías de los adláteres. Estoy por la democracia representativa y protagónica, desde las bases, como lo predijo el Che, Mao Zedong y los chinos capitalistas. ¿O no?
En todo caso, siempre existirá un aparato. El problema no es que existan los aparatos, sino que los dirigentes del aparato sean integradores de opiniones y buenos pastores de individuos, uno; y que sepan hacia dónde van y sean capaces de señalar horizontes creíbles para los militantes y para la ciudadanía, Psuv y Somos Venezuela, "Un partido nítidamente situado a la izquierda". ¿Cómo se define eso? Una cosa son las palabras y otra cosa son los hechos. El Flautista de Hamelín. Quiere llevarse a la gente detrás con música, pero sin letra". Pues eso.
Desde Gramsci para acá, sabemos que "relación de fuerzas", "guerra de posiciones", "sociedad civil" y "hegemonía" son conceptos fundamentales para todo el que pretenda reformar una sociedad. Además, Gramsci distinguió solventemente entre la acción política en las sociedades occidentales desarrolladas y en las otras: el "asalto a los cielos" no era para Occidente. No lo era ya entonces, en vida de don Rómulo, cuyo fantasma está en Miraflores, y menos lo es ahora. Ni Cuba, ni Bolivia, ni Venezuela ni Kosovo son modelos a seguir. Fracasaron, estos comunistas.
Se abre, todo un proceso anti constitucional en el país., antes, nos abrazamos a ella para avanzar, la mejor del mundo, expresaba nuestro presidente Nicolás Maduro Moros. Todos los partidos se enmarcaban a ella, con ayuda de taquígrafos y secretarios, contándose con una pluralidad de dirigentes políticos intermedios que se dicen nacionalistas, pero, van a dominicana a platicar a oscuras nuestras verdades, Así nunca puede haber consenso, menos con Zapatero, pregúntele a Cataluña sus favores, dio albergue a yihadistas incendiarios que han complotado las regiones españolas. Le interesa el negocio del Coltán.
La sociedad venezolana ha sido eclosionada y es objeto de una multaleteridad de decisiones. Y la piel de nuestro país se cambia a un nuevo entramado institucional.