Fakes News, una palabrita bien pajúa, diría el Fiscal General con esa dosis de irreverencia que siempre lo ha caracterizado. A traducir literalmente como noticia falsa, es un término puesto de moda por algunos especialistas de la comunicación, en ese proceso de reinventar y buscar nuevos vericuetos para tratar de explicar el impacto de la comunicación en el siglo XXI.
Recientemente el Fiscal General ha sido víctima, no es la primera vez ni la última, de una campaña, la gran Postverdad, es haberlo metido en una lista de sancionados por la Unión Europea, que desconoce toda la trayectoria de lucha de uno de los defensores de derechos humanos más importantes de América Latina, la segunda Postverdad, la aplicación de sanciones financieras a una lista de 56 funcionarios venezolanos, entre los cuales se incluye a quien viene librando una de las luchas más importantes por adecentar el manejo de la cosa pública en Venezuela.
La tercera Postverdad las sanciones por un falso blanqueo de capitales por parte de Suiza, el mayor lavador y esterilizador de dinero sucio del planeta, que pretende castigar a quien ha emprendido la batalla, por descubrir el entramado de lavado de la Banca privada de Andorra, uno de los casos de corrupción globalizada más importantes del mundo.
En esta dimensión emocional se mueve la actual guerra sucia contra el poeta Tarek, y es a partir de este espacio donde se comienzan a tejer las maniobras, e intrigas, contra una de las personalidades políticas más importantes de la actualidad venezolana.
Las falsas noticias contra el Ex Defensor de Derechos Humanos, ahora tienen una nota singular, se agrega una columna del Toby Valderrama, viejo operador político de Rafael Ramírez, a quien el comandante Chávez siempre
mantuvo a distancia, donde intenta poner a pelear a los líderes más reconocidos del Chavismo por una falsa sucesión presidencial.
Otra característica que resalta de la actual guerra de Fakes News es los medios y la fuente, tradicionalmente se pagaba a un grupo pequeño de periodistas tarifados, y algunos articulistas, se utilizaba un portal Web, y se buscaba crear una sensación de realidad de la noticia. Ahora se recurre a la mensajería Wassap, medio que hace difícil rastrear el origen de la infamia, y que tal vez tenga menos impacto de difusión, pero en este caso esto no interesa mucho.
Es obvio que detrás de esta cadena de noticias, y calumnias están en primer lugar los gusanos de Miami, es decir todo el bandidaje que literalmente se mamo a PDVSA, y que termino refugiado en las playas de Palm Beach, por lo menos el traidor de Páez, tuvo más Glamour y se fue a la New York de Sinatra.
También es seguro que estén anotados allí la elite política que ha hecho de la corrupción globalizada una forma de vida, y para quienes Trump con su derroche, su consumismo, su irreverencia, y su modo de vida es la máxima representación.
Pero lo inusual es que los salteadores de poco linaje, la élite globalizada, y los enemigos internos, coincidan en un solo objetivo, tratar de mermar los apoyos políticos y populares, para acabar con uno de los liderazgos más interesantes en la actual coyuntura política.
Las cadenas de noticias contra Tarek, con otros medios y otras fuentes, siguen el mismo patrón de la guerra sucia que se utilizó para removerlo de la Gobernación de Anzoátegui, ¿estarán tratando de removerlo de la Fiscalía?, ¿Cuál excusa utilizaran ahora?
Sin duda que es una operación donde participan especialistas vinculados a la inteligencia psicológica, cuyo objetivo principal es alejar a Tarek, del centro
del poder político, convertirlo en un líder incómodo para el gobierno, por eso la coincidencia de sectores aunque con distintos intereses y un solo fin, TODOS CONTRA TAREK.
