Vivimos en un mundo preñado de contradicciones budaianas, de sucesiones armónicas simultáneas contradictorias instantáneas heraclitoianas, Chopin entre Bach/Beethoven, puntillismo/cubismo, Seurat/Picazo, descomposición del puntillismo seuratiano/composición con hoja blanquinegra del cubismo legeriano, lo lineal/lo sinusoidal, verso/prosa, hay más de ocho millones de casos límite contradictorios, forma moderna ilustrada originaria de enciclopedia védica upanishad, ser/noser, Euclides/No Euclides, uno de ellos. Similaricadencia cervantina irónica, ofensiva/defensiva, semejanza/antípodo, oportuno histórico aristotélico, exceso/defecto. Todos los casos límite contradictorios, poseen tercio incluso estagirita (1/2). Todos tienen optimalidad ortogonal pitagórica, dicho fractal, forma significativa conmovedora. El fractal, objeto de estructura irregular geométrica fragmentada, llevado por una explicación distinta de las teorías clásicas, entre los aspectos límbico antagónicos, significación/significatividad. Avista copos de nieve, ramificaciones bronquiales, redes hidrográficas, tesituras reticulares espectrales de los casos límite contradictorios onda/partícula, tesituras reticulares penelopeianas, de los caso límite contradictorios, tejer/destejer, urdimbre/trama, álgebra/geometría, percepción/espacio. Asina, lo avistado en corte de culo del repollo, repetido fractal a diferentes escalas. El fractal, continente que contiene al tercio incluso aristotélico, comprende infinitos puntos con las mismas características del tercio incluso estagirita, de identidad, igualdad, reciprocidad, complementariedad, proporcionalidad, equilibrio dinámico, unidad y reto de contrarios. Al tercio incluso aristotélico (1/2), del fractal, tienden, y de él trascienden, la síntesis, de las palabras pareadas paradójicas, geometría euclidiana/geometría noeuclidiana, el fractal, dinámica sintética generalizada, continente que contiene como contenido a la partícula partitiva viva (1/2), de cambio, transformación, eterna noria notoria, edificación cada día más alta, llevada por la base de otros principios generalizados sintéticos. Abrevadero del fractal, embebida tradición creativa, permanencia formal matemática, modernidad ilustrada originaria en Heráclito, Euclides, Buda, Pitágoras, Cervantes, pero más profundamente en los himnos védicos upanishads del ser/noser. Heráclito en tambor repleto de hecatombes fecales hasta la nuca antihiperhidrosis corporal, expresaba la simultaneidad de los contrarios en los casos límite contradictorios, descender/ascender, tal socialismo/capitalismo, Victorioso Maduro/Derrotado Trump, síntesis en tambor de puputov nidoroso guarimbero de boñiga yanqui go home, cosa no dicha de Buda, Euclides, Homero, Zenón, Pitágoras, Cervantes, ni tampoco de Hegel, quien abrevó en un tambor con agua clara contradictoria heraclitoiana. Con digresión/sin digresión, el fractal, optimalidad ortogonal pitagórica en lienzo pictórico blanquinegro de dinámica de grupos villaverdeianos: Torbellino de ideas y Proyecto de visión futura. La figura geométrica euclidiana, rectángulo y diagonal, de los casos límite contradictorios, consciente/inconsciente, forman dos pirámides, dos triángulos rectángulos pitagóricos, donde hipotenusa es diagonal, optimalidad ortogonal samosiana, síntesis de mejores respuestas, óptimos resultados, mejor solución posible de un problema entre tesis/antítesis, ser/noser, en que se dan las características del tercio incluso aristotélico, ut supra, que le corresponden también al fractal. Unidad y reto de la geometría euclidiana plana/la geometría noeuclidiana espacial, espacios concretos/espacios abstractos, mundo euclidiano ordinario/mundo noeuclidiano extraordinario, geometría euclidiana/geometría lobatchewskiana, geometría euclidiana/geometría riemanniana, en similaricadencia cervantina, minimalidad/maximalidad, cosmos expansivo/cosmos contractivo. Al centro universal unificado teilhardiano de unicidad instantánea (1/2), de la optimalidad ortogonal pitagórica, Dios Geómetra Profundo abismal, fractal significativo formal conmovedor, tienden y trascienden lo euclidiano/lo lobatchewskiano, lo euclidiano/lo riemanniano, cosmos expansivo/cosmos contractivo. Que no de otra suerte que como cuando la paradoja de Zenón de Elea, Aquiles/Tortuga. Aquiles tiende a (1/2), la tortuga trasciende de (1/2), síntesis de lo inalcanzable por Aquiles, dado del equilibrio dinámico fractal factual jerarquizado. Tanto tiende Aquiles, como trasciende la tortuga del punto límite topológico borroso (1/2); tanto es lo más cómo lo menos; el todo como la parte.
Si el Libertador Simón Bolívar, voló por entre las próximas edades, pasado/porvenir, y fijó su imaginación en los siglos futuros, siempre a caballo, entre la locura/la cordura, en un espacio topológico borroso de una silla de montar fractal, entre los casos límite contradictorios, borren trasero/borren delantero, idem a geometría euclidiana/geometría noeuclidiana, entonces con digresión/sin digresión, el fractal culo’e repollo, sea la optimalidad ortogonal pitagórica culo’e fierro del Libertador. Podrá no haber poetas, siempre habrá poesía bequeriana. Podrá no haber matemáticos, siempre habrá geometría.
