Lo advertimos en el artículo del jueves 2 de agosto de este año https://www.aporrea.org/economia/a267188.html, “Si el 20 esto se arregla, ¡nos invaden!, escríbanlo…”, y en otro artículo anterior titulado “He aquí el gran plan diseñado por la CIA para acabar con el PETRO (PDVSA)”.
En este último paso, Juan Manuel Santos se metió a Youtuber (bien guasón y miserable, por cierto) con el único fin de incrementar los ataques terroristas contra Venezuela. El ataque de ayer fue una combinación de las nuevas acciones de Washington y el cartel de Lima, en una desesperación concertada por evitar las decisiones que se pondrán en marcha el 20 de agosto.
Gran parte de la tragedia venezolana es la oligarquía colombiana (algo histórico, como demostramos también en otro artículo muy reciente), y el hecho de que tengamos las más grandes reservas de petróleo del mundo. Viene otra fase de la guerra contra Venezuela, decidida como está la ultra-derecha colombiana a seguir teniendo a Venezuela como su principal depósito de gasolina y como una ruta firme para ella trasvasar su cocaína y marihuana a través de nuestro país, rumbo a Estados Unidos y Europa.
Advertimos hace tres meses también al Presidente Maduro, que ahora esa ultra-derecha se concentraría en atentar contra su vida. Y son tan cobardes que utilizaron los criminales drones, a través de un grupo de los eternos mercenarios colombianos. La orden vino de los gringos a través de los referidos mercenarios colombianos. Colombia no hace nada sin orden gringa. De la guerra de baja intensidad, pasan ahora a las acciones bélicas directas de tipo terrorista, como comenzaron en Libía, Siría, Afganistán e Irak.
La reconversión económica es mortal para los ladrones de la gasolina, una de las más poderosas mafias del hemisferio en la cual está involucrada la propia Exxon desde Colombia. Más de cinco mil millones de dólares se llevan estas mafias cada año, y saben que con este dinero saldremos del gran atolladero en que nos ha mantenido la atroz guerra económica desde 2013.
Los advertimos, inmediatamente luego de los anuncios del presidente Maduro el 1º de agosto: de movimientos del Pentágono y Colombia para abortar los planes del Presidente Maduro sobre la reconversión monetaria de Venezuela…
Advertimos igualmente que se ha intensificado de manera demencial el tráfico vehículos de Venezuela hacia Colombia cargados con gasolina, medicina y alimentos, en una vorágine jamás vista…
Que Juan Manuel Santos en su despedida, en combinación con el mequetrefe de Iván Duque será lanzar múltiples acciones terroristas contra Venezuela en varios estados de la frontera.
Que los gringos, que han apostado por la fulana ayuda humanitaria y con ello entregando millones de dólares a los paramilitares colombianos, apuesten ahora por una invasión.
Qué gringo ofendido no descansa. Que gringo guapetón no acepta derrota. Que gringo sino gana arrebata. Y que los gringos cuando no quiebran a una nación por medio de sus sabotajes y mercenarios infiltrados, entonces sacan sus portaaviones, a sus mari-mari-tornes superdotados y… arrasan. Ese es el terrible cuadro que condujo al ataque de ayer, y que debemos estar preparados más que nunca para derrotar y hacerles morder el polvo. Aquí, nadie se rinde, carajo!
