- Era casi habitual los cortes de luz en varios lugares de Venezuela: en todo el estado Mérida, San en todo el estado Táchira, en el estado Zulia, en Barinas, Guárico,…, ahora están los terroristas desafiando fieramente a Caracas, un lugar sagrado al que el Comandante Chávez siempre hizo todos los esfuerzos posibles para que nunca fuese tocada por los cortes de luz. Este desafío de la ultra-derecha es realmente preocupante, y requiere de una acción contundente por parte del gobierno nacional.
- He propuesto en varias ocasiones a la Asamblea Nacional Constituyente el estudio de leyes implacables (cien años de cárcel para los culpables, por ejemplo) para aquellos terroristas que atenten contra servicios públicos esenciales, relacionados con la seguridad nacional, tales como la electricidad, el sistema masivo de transporte, los puentes o túneles, las comunicaciones por internet, la salud, la alimentación y la educación.
- Añádase a esto que el odio contra la patria sigue inoculado en vastos sectores del sifrinismo nacional; las guarimbas, por ejemplo, siguen perturbando en Mérida: antier destruyeron dos enormes unidades del Trolebús unos grandes carajos fanáticos del equipo de futbol "Estudiantes".
- Existe una CORPOELEC PARALELA que paraliza en muchas regiones la electricidad cuando le da la gana. Lo que se vive en el Zulia es una guerra declarada contra el país, algo monstruoso pocas veces visto en América Latina. Con esa gente asesina que es capaz de ocasionarle una tragedia tan inmensa a la patria, no se puede tener ninguna clase de contemplaciones. En Mérida, cuando se anuncia una cadena nacional para informar sobre medidas urgentes para el país, quitan la luz por más de dos horas. Me informan que lo mismo ocurre en el Táchira.
- Cuando nos quitan la electricidad se produce un apagón horrible que desquicia a la sociedad: en los edificios no llega agua a los apartamentos; se atascan (y dañan) los ascensores impidiendo en situaciones de emergencia que niños y enfermos puedan desplazarse; en muchos hospitales y clínicas se paralizan los quirófanos; no pasan los puntos en los comercios, los bancos no funcionan; se va a la mierda internet, no hay comunicación telefónica que valga, los atascos en la ciudad son pavorosos, se dañan aparatos eléctricos y nadie responde por ellos. Las oficinas públicas dejan de trabajar, nadie puede saber lo que está pasando en el país, si hay una guerra contra Venezuela porque realmente quedamos en un limbo absoluto sin radio ni televisión.
- No olvidemos que esta guerra se la hicieron a muerte a Cuba durante muchos años, pero allá no andaban con la pendejada nuestra de estar perdonando a tanto asesino y terrorista. De modo que todos los centros importantes de nuestros generadores de electricidad deben urgentemente ser militarizados e involucrar en esta protección al pueblo, a la milicia.
- Todo esto alcanza una importancia vital ahora cuando nos encontramos en otro nivel de la reconversión monetaria, y requerimos darle un impulso a la producción nacional.