La señora Nikki Haley, embajadora de Trump en la ONU, le echó un balde agua helada al presidente de la ANC en la cara que, a ella no se le arrugó cuando lo acusó de ser el responsable -y no el jefe- de una red del narcotráfico que él mismo lleva cargamentos de droga desde Venezuela a Europa, pero a EEUU no lleva nada, bueno esto último no lo dijo, pero se entiende que los drogadictos son europeos y no yanquis, pero con que facilidad el asambleísta utiliza la bilocación de su persona para ubicarse tanto en Caracas como en Europa, pues de Diosdado se ha de creer todo al adueñarse de todos los poderes hasta ser el padre del narco europeo y, ¡eso que no es colombiano! Ni amigo de Uribe Vélez.
De Diosdado he oído de todo desde rico hasta lo que se pueda imaginar con mucho gusto hasta que es dueño de las tres partes del Teritorio Nacional y lucha por la otra, por decir lo menos, del poder con el consentir del militar que quiso ser, pero se consiguió con Chávez, y no con Rafael Ramírez como la exquisitez pdvsana de mando y figura y corriendo de país en país por sus aventuras transformistas de político que Diosdado no tiene y, que debe aprender más de éste como el tuátem del siglo.
La embajadora Nikki Haley con una insania y vesania contra Diosdado, se recrudeció con un puff de valentía a su favor que puso a Diosdado en lo más alto del pabellón de los EEUU a ondear por todo el mundo no como un simple Al Capone, sino como un verdadero rey de las divisas en euros que llegan a Caracas en oro bruto y, Diosdado muerto de la risa estira su mazo y con él descansa de tantos bichos y bichas egoístas que hay en el mundo y los margariteños dirían, y sin oficios.
Ahora, lo que da rabia y dolor después que nos enteramos de tan maliciosa noticia y de boca de quien ha salido y de donde ha salido que Bachelet por poco llora de rabia indecisa no sin pensar en el grupo del Perú que peló esa histórica noticia que debe tener las redes encendidas, y a Jaime Bayly desnudándose de ternura en tv en Miami, untado de sabroso como un perruno peruano migrante de su pobre país que como xenofóbico brilla en el mundo en contra de los venezolanos, que a decir, de misia Nikki Haley prefieren irse de nuestro país a "pedir limosna", la que los gringos le dan a muchos países de América Latina, para que oigan y vean y se hagan los locos si de Venezuela se trata.
¿Más famoso que Diosdado, habrá otro? Hay que preguntárselo al gobierno de los EEUU que no salen de uno para fuck a otro que ellos se inventen y, menos mal que todavía no se han metido con el carné de la patria que cualquier día por venir amanecerá como el carné internacional de la limosna que los colombianos lo tienen en la mira, en la mira de sus buenos deseos de que le entre la gasolina subdidiada por la frontera no por el país rico que era Venezuela -según Nikki Haley- que con todos sus buenos deseos nos quiere ver como los que están en el grupo de Perú, tirados en la alfombra de su patio trasero, pidiéndole limosnas y con las ganas que tienen de invadirnos a ver si se llevan nuestra pobreza, contradicciones Sancho, diría Don Quijote.
A Diosdado el Gobierno de los EEUU, por lo que se ve, lo tienen en tres y dos y, lo más seguro, no le van a dar la base por bolas, sino más bien lo espera el paredón de cárcel por vida por meterse como responsable de una red que no es de las de comunicación, sino en una red de redes que el que cae hasta allí llega y, si fuéramos Diosdado rezaríamos tantos Padres Nuestros que se le rezan a los muertos a ver si vuelven, pero Diosdado está en manos de Trump y Trump lo que manosea lo seca o se los traga vivo.