Este 5 de enero de este Nuevo Año que entró caliente con mucho fuego político que quema, dio a lugar la designación del nuevo joven presidente de la AN en desacato que, como demócrata le correspondió a Juan Guaidó dentro de la "dictadura" de Maduro que además, infló la perspicacia publicitaria de autoridad política que determina que, el parlamento venezolano es más importante que el poder ejecutivo del presidente de la república y, como por obra de Trump, del Grupo de Lima, y de la mala intención de Almagro como secretario de la OEA, fue que el encargado de negocios a la embajada de EEUU tuvo a bien representar, para mejor balanceo a nivel mundial con tajante demostración que la soberanía nacional no reside en el pueblo, sino en los partidos políticos de la oposición.
Y, en ese embrollo de ideas que enturbia la potestad de nuestro país, se ha desatado una polémica que nos deja descalzos de actitudes que alguien sobra dentro del eje político nacional, lo que deja en suspenso que desde, el 10 de enero en adelante entramos en período de transición, es decir, que entramos en trance de espera de horas de tránsito hacia la democracia como lo encaró su flamante presidente Guaidó con un talante de liderazgo como el que no tiene pelos en la lengua y, las espuelas del mando bien afiladas que nos deja en un pedir sin dar que, Venezuela cambió por completo sin la oposición estar en Miraflores, pero como órdenes son órdenes, las órdenes se cumplen, así de fácil.
Y como aclaratoria oportuna en otras palabras queda claro que, la AN es constitucional y, el próximo gobierno de Maduro es inconstitucional, lo que le da razón a Ramos Allup de decir que cualquier cambio político en el país, debe realizarse de manera constitucional, ya que quedarían como golpistas dentro de una "dictadura" que todavía ladra y, que él no ve, pero Guaidó sí y, por tal motivo dialogó con Iván Duque, quien además de expresarle su apoyo, le recomendó que se metiera en el tumulto de la nueva historia por la que él transita una vez que descubrió por Pompeo que los padres patrióticos de Colombia son los héroes yanquis con Trump a la cabeza, por lo que a su entender supone que, Santander hizo más que Bolívar acá como allá en su país y, mire, le -dijo- que la historia está llena de disparates como de pendejadas, por lo que le exigió con pujanza discreta que hiciera historia que, el próximo presidente de Venezuela por orden imperial será don Julio Borges que, está en su país haciendo un curso intensivo PHD de drones y, no Maduro como le corresponde por elección "no compartida ni aceptada por ellos".
Y, a cambio Guaidó como nuevo presidente de la nueva AN con más intensidad como -demiurgo insólito- que los anteriores presidentes, le comunicó a Duque, sin decaimiento ninguno y con voz temblorosa de emoción, pero cortante de rabia, como si estuviera en the White House fumándose un habano con Trump, micrófono en mano -dijo-:
-"Empezaremos a abordar materia relacionada, por supuesto, cómo abordar este período de transición y de tránsito hacia la democracia" -y fíjense que improvisó sin dudas- y, continuó como el que va en bajada Caracas-La Guaira: "Nicolás, el 10E este parlamento no te va a juramentar". ¡Toma tu tomate!Y, decimos nosotros, sin sospecha ninguna -te jodiste Nicolás...- ¿y a hora quién te va a juramentar como constitucional- ¿se dan cuenta que Guaidó y Ramos Allup están jugando para el mismo equipo? -¿se pusieron de acuerdo- no creo, vainas de la vida, dí y yo te remiendo el capote. Y, vean la autoridad y la moral prístina con que se expresó el nuevo "presidente" posiblemente de Venezuela como presidente de la AN por la transición en puertas cuando dice, Nicolás y no presidente Nicolás. ¿Qué es eso? Se perdió el respeto entre los poderes y, ¿entonces de qué democracia hablan? Y...
No calló, siguió: "Estamos en un sistema opresor no solo eso, sino Miserable. Cómo llamar a un régimen que busca someter por el estómago; eso configura un sistema Miserable". Se dan cuenta que Guaidó está hablando como si fuera Iván el presidente de Colombia que tiene el sagradísimo e injerencista deber de hablar así del régimen sin órdenes de Trump, sino a riesgo y consideración y a, Guaidó le salió lo de "Miserable" a pedir de boca, le quedó bello con toda la firmeza de su verbo constante y sonante que sigue el camino de la democracia constitucional sin abstracción ni paroxismo ninguno y, al darse cuenta que se había deslenguado se metió por el atajo de la enmienda inmediata y, entonces -dijo-: "La Presidencia de la República no se encuentra vacante. Se encontrará a partir del 10 de enero usurpada, porque estamos en dictadura. Y recuperar la democracia no depende de una ley o de nombrar a alguien, depende de todos". Es decir que la "dictadura" anterior no usurpa, usurpará la nueva y, ahora quiere implicar a todo el mundo en su democracia que sí es democracia que le permitió a la dictadura y le permitirá que él sea el presidente de la AN que dentro de la dictadura existe, es decir, un enredo de desenredos de políticos ociosos y, para finalizar reiteró que: "hay mucha expectativa con respecto al 10 de enero ...".No sabemos, ni imaginamos que quiso decir, pero, ojala que no haya sangre dentro de su expectativa espeluznante y de los que lo acompañan.
